Las tiendas de Inditex fueron de las pocas que esperaron hasta ayer para iniciar la campaña de saldos
02 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.No hubo ni enormes colas de compradores impacientes delante de las puertas de los comercios, ni carreras ni gritos una vez que se levantaron las verjas. Las rebajas ya no son lo que eran. El motivo: muchas cadenas adelantaron la campaña de saldos y desde hace quince días ofrecen sus productos con descuentos, e incluso algunas ya iniciaron sus segundas rebajas.
El grupo de Amancio Ortega es uno de los pocos que todavía sigue fiel a la tradición de inaugurar la campaña el día 1, algo que provocó que ayer sus tiendas se convirtieran en una auténtica zona cero de los descuentos. Pasaban pocos minutos de las diez de la mañana y los pasillos del centro comercial Marineda City parecían un desierto, un paisaje que cambiaba totalmente al asomarse a las tiendas de Amancio Ortega. Centenares de personas -sobre todo muchas jóvenes, la mayoría vestidas igual (shorts, camisetas y tenis)- abarrotaban y revolvían las estanterías de los Zara, Pull & Bear, Bershka, Stradivarius y demás, originando en menos de un cuarto de hora enormes colas para pagar.
En una de ellas estaba Lara Fernández, que el día anterior ya había escogido y probado todas las prendas que se quería comprar. «Ya lo hice el año pasado y así no tengo ningún problema de quedarme sin lo que quiero», confesó. La que no tuvo tanta suerte fue Alejandra Pérez, que buscaba desesperadamente un pantalón que no logró encontrar. «Lo han retirado y no lo quieren poner con descuento», criticaba, al mismo tiempo que aseguraba que ya le había pasado en más ocasiones.
A medida que fue avanzando el día, y que el tiempo descartó la jornada de playa, las zonas comerciales se fueron llenando de una legión de compradores que, además de las tiendas del grupo Inditex, también aprovechaban para pescar alguna ganga en otras cadenas. Entre ellos no faltó quien picó en varias prendas de la nueva temporada, o también denominada «de continuidad», que cada vez ocupan más espacio y que se sitúan estratégicamente al lado de las estanterías de las de saldo con el objetivo de que la gente empiece a comprarlas a su precio normal.
Por Internet
Las nuevas tecnologías también han ayudado a cambiar el modus operandi de las rebajas, puesto que muchos optan por comprar cómodamente desde Internet, y esperar a que luego les llegue el paquete a casa.