Las editoras del genoma, Premio Princesa de Asturias de Investigación

Efe MADRID

SOCIEDAD

PETER STEFFEN

Las bioquímicas Charpentier y Doudna han desarrollado una tecnología que permite corregir genes defectuosos con un nivel de precisión sin precedentes

28 may 2015 . Actualizado a las 17:41 h.

Dos bioquímicas, la francesa Emmanuelle Charpentier y la estadounidense Jennifer Doudna, han sido galardonadas este jueves con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2015 por desarrollar una tecnología que permite la edición de genes y la manipulación de ácidos nucleicos con gran precisión.

Estas bioquímicas son las madres de una sofisticada técnica que permite editar genomas de manera sencilla y precisa, y manipular el ADN de plantas, animales y humanos. La herramienta, bautizada como CRISPR-Cas9, ha supuesto una revolución biotecnológica.

Concretamente, su técnica permite reescribir el genoma y corregir genes defectuosos con un nivel de precisión sin precedentes y de forma muy económica, lo que abre «gran esperanza» a la terapia génica y al tratamiento de enfermedades como el cáncer, la fibrosis quística y el Síndrome de Inmunodeficiencia Severa Combinada (la enfermedad de los llamados 'niños burbuja'), entre otras.

Emmanuelle Charpentier (Juvisy-sur-Orge, Francia, 11 de diciembre de 1968) bioquímica y microbióloga es una de las investigadoras más innovadoras en el ámbito de la terapia genética.

Al igual que los otros siete premios que concede la Fundación Princesa de Asturias, el galardón está dotado con una escultura de Joan Miró -símbolo representativo del galardón-, 50.000 euros, un diploma y una insignia

Jennifer Doudna recibe «emocionada» el galardón

La bioquímica estadounidense Jennifer Doudna dijo estar «emocionada» por la concesión del Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica 2015 por desarrollar una tecnología que permite la edición de genes y la manipulación de ácidos nucleicos con gran precisión. «Este premio subraya la importancia de la ciencia en la sociedad y para ayudar a mejorar la condición humana. Ojalá (este galardón) inspire el trabajo de la siguiente generación de científicos», comentó la investigadora, que trabaja en la Universidad de California (EEUU), tras conocer la noticia.