El ministro se basa en que puede tener «efectos adversos complejos»
21 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«De momento no vamos a cambiar el criterio de que esta sea una vacuna hospitalaria sujeta a prescripción». Estas declaraciones del ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, han caído como una losa entre los pediatras, farmacéuticos y padres que en algún caso llevan meses reclamando la entrada de la vacuna contra el meningococo B en el calendario oficial español o, como mal menor, la venta libre en farmacias.
Durante un encuentro con periodistas en Zamora, Alonso precisó que este fármaco no forma parte del calendario de vacunaciones y únicamente está indicada su administración en una zona concreta cuando se produce «un brote» o cuando se trata de colectivos «que se hallan en situación de riesgo».
En declaraciones recogidas por Efe, Alonso subrayó que, en España, la vacuna está sujeta a «estricta prescripción médica» porque puede tener «efectos adversos complejos», motivo por el que conviene que se utilicen siempre «criterios de salud pública». Y subrayó este argumento al aludir al creciente número de ciudadanos que la están comprando en otros países, como Portugal, Francia o Andorra.
En el caso de Galicia, Chaves o Valença do Minho son localidades frecuentadas por los padres para adquirir el medicamento e inmunizar a sus hijos.
Alonso solo dejó una puerta abierta: estudiar «con atención» y analizar la petición para que se permita su dispensación bajo prescripción facultativa en las farmacias, como ocurre en Portugal. Pero en principio, también la descartó.
Las reacciones de padres, pediatras y farmacéuticos se avivaron tras estas palabras. Ayer ya eran más de 75.000 las personas registradas en una iniciativa de la página web Change.org que reclama al ministro y al secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, la venta libre en farmacias de la vacuna contra el meningococo B, de forma que se ayude a erradicar la meningitis en España. Detrás de esta propuesta están La Fundación Irene Megías contra la Meningitis, que es quien registra la recogida de firmas, y el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, que presta su apoyo.
Según responsables de la fundación, «con esta inexplicable decisión [la vía exclusivamente hospitalaria], la vacuna solo se está administrando a un porcentaje reducidísimo de la población, dejando fuera de su ámbito protector a la gran mayoría de los niños españoles, por lo que no se logrará ningún efecto de inmunización general».
En Galicia, la diputada del PSdeG Carmen Acuña acusó ayer a la Xunta de escudarse en la postura del Ministerio de Sanidad para no dispensar vacunas contra la meningitis B, y reclamó su «inclusión inmediata» en el calendario infantil.
Los padres gallegos están «indignados» con la decisión del ministerio
«No es que las palabras del ministro nos hayan parecido mal, es que estamos enfadadísimos», confirmaba ayer a La Voz de Galicia Mar Golpe, portavoz de los padres de Arteixo que se han organizado después de los brotes de meningitis que afectaron este curso a la localidad, y que han salido a la calle para reclamar la inclusión de la vacuna del meningococo B en el calendario y la venta en las farmacias gallegas.
Este colectivo volverá a manifestarse el sábado, a las 12 horas, en la avenida del Balneario, donde leerá un comunicado a favor de la inmunización. «Está confirmada la presencia de casi 500 personas y vendrá gente de Oleiros, Malpica y otros puntos de Galicia», asegura Mar Golpe.
Según informa la Redacción de La Voz en A Coruña, el próximo miércoles, Arteixo acogerá en el Centro Cívico una reunión abierta al público sobre la vacuna en la que estará Xurxo Hervada, subdirector xeral de Información sobre Saúde e Epidemioloxía de la Xunta.
Una niña en Asturias
La Consejería de Sanidad asturiana confirmó ayer un caso de meningitis (probablemente meningococo B). Una niña de dos años fue ingresada en la uci pediátrica del Hospital Universitario Central de Asturias. Su evolución en las últimas horas ha sido buena y se contaba con que pasase a planta en breve. Un pediatra de un centro de salud fue el que decretó el ingreso al apreciar en la pequeña vómitos, manchas en la piel y fiebre elevada.