Loli Touriño, campeona de España de bádminton de veteranos: «Los maridos y las esposas se llevan mal cuando juegan juntos»

Loreto Silvoso
loreto silvoso REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

MARCOS MÍGUEZ

«Al principio, el bádminton me parecía un juego tonto, me daba risa»

21 may 2015 . Actualizado a las 13:31 h.

En los campeonatos internacionales compite con su marido, pero no entrena con él «para no discutir». Dolores Touriño Lesta (A Coruña, 1949) cree que la mayoría de los hombres «se ponen muy repugnantes con el tema del deporte». Si lo dice la campeona de España de bádminton de veteranos, habrá que preguntarle por qué.

-Porque los hombres son muy quisquillosos. Marcan una rayita y, si te pasas, te dicen: «¿Por qué no fuiste hasta ahí?»; y si, al final, vas, te sueltan: «¿Pero por qué fuisteee?» [Dice chillando y entre risas]. Mi marido y yo jugamos poco juntos por eso. Decidí competir solo en individual o en dobles.

-Así que ya no tiene pareja oficial de bádminton.

-No. Los maridos y las esposas se llevan mal cuando juegan juntos.

-¿Tampoco entrenan a la vez? Él [Fernando Estévez Gago] sigue yendo con usted a los torneos internacionales.

-Yo solo compito con mi marido en los campeonatos de Europa y del mundo. En los de España, no. En el día a día, no entrenamos mucho juntos para no discutir.

-¿Está muy solicitada?

-Bueno, en individuales he vencido en todo a lo que me he presentado. Llevo cinco campeonatos de España ganados. En dobles, quedé campeona de España varias veces, con María del Carmen Longueira.

-Y eso que se metió tarde en este deporte. Antes fue una pionera del baloncesto femenino

-Sí, yo jugué al baloncesto toda la vida, desde los once años. Incluso estuve en Primera División con el equipo de Tabacalera [el de la antigua fábrica de Tabacos de A Coruña]. Luego jugué al voleibol y, finalmente, me pasé al bádminton.

-¿Qué le atrajo, en concreto, de este deporte?

-Me rompí los ligamentos cruzados y me tuve que buscar un deporte en el que no tuviera que saltar mucho. Yo tenía unos cuarenta años cuando empecé en esto con el Club del Mar.

-Hay otras disciplinas deportivas que también encajarían con eso de no saltar mucho.

-El caso, es que a mí, al principio, el bádminton me daba risa. Yo decía: «¿Pero eso qué es, con una pluma ahí bailando?». Me parecía un juego tonto, una coña. Lo que pasa es que empecé a meterme de lleno y vi que de juego tonto nada, que era muy serio y muy dificultoso. Además, con el bádminton, siempre estás aprendiendo.

-Acaba de llegar de Huelva, donde se han celebrado los campeonatos de España de veteranos. De allí es Carolina Marín, la campeona del mundo.

-Carolina es la bomba. Y siempre reivindicativa. Me gusta.

-Ella dice, entre otras cosas, que en España parece que solo importa el fútbol, y algo el baloncesto y el tenis. ¿Está de acuerdo?

-Menos mal que, desde que está ella, ya ponen los partidos de bádminton por la tele; porque antes, ni eso. Sí, en España parece que solo existe el fútbol.