El Año chino de la Cabra augura tiempos convulsos

La Voz JOANA CHIU, STEPHAN SCHEUER | DPA

SOCIEDAD

KIM KYUNG-HOON | Reuters

Se prevé una etapa de conflictos y ralentización económica, y son muchos los padres que prefieren no traer en estos meses hijos al mundo

18 feb 2015 . Actualizado a las 02:09 h.

En la madrugada del jueves, China celebrará con una gran fiesta la llegada del ciclo de la Cabra de Madera, aunque según la sabiduría popular, el Año Nuevo no traerá demasiados motivos para la fiesta: se augura una etapa de conflictos y ralentización económica, y son muchos los padres que prefieren no traer en estos meses hijos al mundo. La cabra (o la oveja, según las distintas representaciones del caracter chino «yang») es el octavo animal del ciclo astrológico chino. Simboliza la paz y la amabilidad, y por eso quienes nacen en este año tienen fama de poseer un carácter moderado y agradable.

Sin embargo, hay quienes piensan que los nacidos en el Año de la Cabra son demasiado dóciles y pasivos, por lo que resulta improbable que lleguen a ser líderes sociales. De ahí que muchos futuros padres estén retrasando sus planes de embarazo o se apresuraran a tener hijos en el Año del Caballo, considerado más auspicioso. En vísperas del cambio de ciclo, los hospitales de todo el país informaron de un aumento de solicitudes para provocar el parto, llegando a exigir incluso cesáreas. Según informa The Global Times, en las últimas semanas el número de nacimientos en las provincias de Liaoning, Shangdong y Gansu aumentó notablemente.

Los animales del horóscopo chino, que además de medir el paso del tiempo predicen la suerte, están ligados cada año a la antigua oposición binaria de yin y yang y a uno de los cinco elementos: metal, fuego, madera, tierra o agua. Cada combinación se repite pasados 60 años. 

Así, según el calendario lunar chino, el nuevo Año de la Cabra de Madera comienza el jueves y es el trigésimo segundo del ciclo de 60 años. Como la madera frena el convulso poder del elemento tierra, será un año «comparativamente menos violento que 2014», señala el astrólogo y maestro de feng shui Raymond Lo. «En 2015, el carácter moderado y flexible del yin y la madera representa una posición de compromiso», afirma en su web. «Y como tal, será más fácil lograr soluciones y acuerdos para resolver conflictos y pugnas», predice. Además, «el clima económico será más estable y tendrá menos fluctuaciones drásticas».

Los augurios de Lo concuerdan con las predicciones del Fondo Monetario Internacional, que en su informe del pasado mes no apuntaba crisis drásticas. Según el organismo, las economías mundiales se beneficiarán del descenso de los precios del crudo y la recuperación de Estados Unidos, aunque China, Rusia, la zona euro y Japón tendrán un crecimiento más lento. 

Sin embargo, los anteriores Años de la Cabra no fueron tan mansos. En 1895, que también coincidió con el elemento madera, la victoria nipona sobre China otorgó al país del Sol Naciente el control de Corea y Taiwan, lo que provocó disturbios generalizados. Y este nuevo año, las tensiones podrían llegar por la disputa en torno al Mar de la China Meridional.

Además, los últimos dos Años de la Cabra (1991 y 2003) marcaron el inicio de las guerras de Kuwait e Irak. «Con el peligro del (grupo terrorista) Estado Islámico en Irak y Siria, no sorprendería que en 2015 estallara una nueva guerra del Golfo», apuntaba Raymond Lo. Y lo mismo opina el maestro del feng shui Lawrence Chan: «Este año hay una elevada probabilidad de que se produzca un levantamiento masivo contra los gobiernos, ya sean huelgas o disturbios», afirma. Para Europa occidental teme la llegada de catástrofes naturales como crecidas y terremotos, mientras que para el sudeste asiático augura peligros como el estallido de una nueva epidemia.