Los abuelos que cuidan nietos ahorran mil millones al año a los padres gallegos

Alfonso Andrade Lago
alfonso andrade REDACCIÓN / LA VOZ

SOCIEDAD

Ángela cuida en A Coruña de su nieta Carmen, de 5 años, y pasa con ella unas seis horas cada día.
Ángela cuida en A Coruña de su nieta Carmen, de 5 años, y pasa con ella unas seis horas cada día. marcos míguez< / span>

En Galicia hay 503.000, y el 37 % realizan esta tarea durante seis horas diarias

14 dic 2014 . Actualizado a las 12:07 h.

Los abuelos no entienden de salarios a la hora de cuidar a los críos; solo de cariño. Los nietos, tampoco. Carmen Villar es una pequeña de 5 años, alegre como unas castañuelas y con la energía de un fórmula 1. Apoyada en un entusiasmo gestual que la desborda, define así la devoción que siente por su abuela Ángela Souto, con la que convive a diario: «Es como un cohete grandísimo que va a explotar».

Los padres sí entienden de salarios. No les queda más remedio cuando trabajan y tienen que buscar a alguien que se ocupe de sus hijos. Eso tiene un precio, y la cuenta es de agarrarse a la mesa cuando no se puede contar con el apoyo de la familia. De hecho, si cogemos el tiempo que los abuelos gallegos dedican a sus nietos y lo convertimos en el dinero que los cuidadores cobrarían por ese trabajo, la cifra resultante es astronómica: más de mil millones de euros que los mayores están ahorrando a sus hijos mediante el cuidado de los niños.

A partir de los 65 años, el 70 % de los españoles son abuelos, según el estudio sobre mayores realizado en la Universidad de Burgos por los profesores Jerónimo González Bernal y Raquel de la Fuente Anuncibay. Hay que sumar como mínimo otro 10 % de los que tienen entre 52 y 64, y todo eso convierte en abuelos en Galicia a unas 503.000 personas que están viviendo una realidad nueva, inexistente hasta su generación: la incorporación de la mujer al mercado laboral ha cambiado el rol de muchos mayores, que han pasado de ser amigos eventuales de sus nietos a auténticos educadores, pues conviven mucho con ellos.

Mayor esfuerzo de la mujer

¿Cuánto tiempo? Veamos el caso de Ángela con Carmen. Los padres trabajan y almuerzan fuera de casa, así que ella recoge a la niña en el cole a las 13.50. «Le doy de comer, de merendar, la llevo a actividades... y sus padres llegan entre las siete y media y las ocho». Casi seis horas diarias. Pero contemos ahora los períodos vacacionales de la niña, cuando los progenitores siguen atareados. «Ahí ya es todo el día. Me dejan a Carmen de ocho de la mañana a diez de la noche, o así».

Los datos oficiales recogen con precisión casos como el de Ángela. Según el informe Las personas mayores en España, publicado en el 2012 por el Ministerio de Sanidad y Servicios Sociales con datos del Imserso, el 37,4 % de los abuelos españoles cuidan de sus nietos a diario; el 27 %, varias veces a la semana, y el 15,1 %, una vez a la semana.

En cuanto al tiempo diario que dedica a esta tarea ese 37,4 %, el Libro blanco sobre envejecimiento activo (también con datos del Imserso) precisa: «Aunque exista la impresión de que esta contribución se limita a llevarlos y recogerlos de la guardería o del colegio (...), la intensidad en el cuidado de los nietos alcanza prácticamente las seis horas diarias: 6,2 las mujeres y 5,3 los hombres. Esa dedicación es además permanente».

«Jóvenes» de 52 años

También es cierto que ahí entran en juego otras variables, pues «no es lo mismo la dedicación en el medio urbano que en el rural», matiza González Bernal, director del Departamento de Educación en la Universidad de Burgos. Pero la media que aporta el Imserso da idea de la magnitud del fenómeno.

En el caso de Galicia, la emigración clavó muchas espinas en el corazón de los abuelos; espinas que ahora intentan quitarse con los nietos. La carballesa María Ofelia Pombo emigró a Basilea (Suiza) cuando tenía 21 años, dejando atrás «unha filla de catro anos e un fillo de nove meses. Quítome o pan da boca para axudar a alguén que teña que pasar agora polo mesmo ca min, que é o máis triste do mundo», sentencia. Con Tania, de 9 años, ha saldado una deuda consigo misma: «Deus mandoume unha neta porque a necesitaba», y por eso cualquier tiempo con la cría le parece insuficiente.

Pero ¿cómo se traduce a dinero el esfuerzo de los mayores? Para eso hay que saber cuánto cuesta al mes una persona que cuide de los niños durante 6 horas, de lunes a viernes. Y la respuesta es 784 euros, afirma Patricia González, propietaria de Edades Vigo, especializada en servicio doméstico. «Hoy es obligatorio asegurar a estos trabajadores -explica-, así que si cogemos un mes de 21 días laborables, a seis horas por jornada, el precio sería de 784 euros». Y si reducimos el servicio a cuatro horas diarias, 567 euros.

Pero este es exclusivamente el valor del trabajo de los abuelos con los nietos. «El cariño no hay dinero que lo pague», añade Patricia, que no considera que ello suponga una competencia desleal: «Está perfecto. El problema en nuestro sector es la gente que trabaja sin seguro, no la labor de los mayores».

No todos los abuelos lo son. Manuel Villar, de Laxe, cuenta solo 52 años. «Tiven un fillo con 19 e nin o criei, que andaba sempre no mar. Agora paso todo o tempo que podo co neto», Nicolás, de dos y medio, que está con él en casa. «Aos 19 non tes capacidade para coidar dun fillo, fíxoo todo a miña muller», admite. La «tranquilidade» con la que afronta ahora la vida le ofrece otra perspectiva, con mucho que ofrecer a Nicolás: «Se lles quere tanto como aos fillos».