La «niña más guapa del mundo» reabre el debate sobre la sexualización de los menores

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

La rusa Kristina Pimenova tiene 9 años, es hija de una modelo y un futbolista, ambos retirados, y muchos la consideran ya la «top model» del momento

01 dic 2014 . Actualizado a las 17:30 h.

Kristina Pimenova solo tiene 9 años, más de dos millones de seguidores en Facebook y más de 300.000 en Instagram. Es su madre, la exmodelo rusa Glikeriya Pímenova, quien se encarga de gestionar y actualizar sus redes sociales. También suyo es el dudoso mérito de inscribir a la pequeña con solo tres años en una agencia de modelos que la ha catapultado a destinos tan estelares para una niña de su edad como la portada de Vogue Bambinia o las firmas Roberto Cavalli, Dolce & Gabbana, Armani y Benetton.

Pimenova, ya bautizada como la «niña más guapa del mundo», no solo ha heredado los genes bonitos de su madre, también los de su padre, el guapo futbolista ruso Ruslán Pimenov, ya retirado. Pero la polémica que estos días coloca la pequeña en el centro de la conversación nada tiene que ver con su belleza, sino con su exposición pública. Cuantitativamente y cualitativamente.

En las redes sociales se libra un acalorado debate sobre si las fotografías que sus propios progenitores publican en estas plataformas son correctas o no; sobre si su imagen, mostrada en lugares públicos adonde todo el mundo puede acceder, es demasiado vulnerable; y sobre si las instantáneas sexualizan en exceso a la inocente Pimenova que no llega ni a los 10 años de edad. Otros usuarios echan más leña al fuego, caldeando el intercambio de opiniones con la idea de que la niña está siendo utilizada por sus padres para ganar dinero, conducida como una marioneta cuyo futuro ya está más que condicionado.