Crisis del ébola: Teresa Romero podrá hacer «vida normal»

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SOCIEDAD

Fernando Alvarado / EFE

Los médicos que han atendido a la auxiliar de enfermería gallega garantizan que «no podrá transmitir la enfermedad»

05 nov 2014 . Actualizado a las 20:34 h.

La enfermera española que superó el ébola, Teresa Romero, podrá hacer vida normal cuando salga hoy del hospital de Madrid donde está ingresada desde el 6 de octubre, según confirmaron los médicos que la trataron en rueda de prensa.

La paciente, de 44 años, recibirá el alta a lo largo del día y está previsto que comparezca ante los medios a las 13.30 para hacer una declaración.

El equipo sanitario que la atendió ofreció antes una rueda de prensa en la que subrayó que Romero no supone ya «ningún riesgo de contagio» para las personas que la rodean.

«Hemos aplicado todas las precauciones. Nos interesa que estos pacientes puedan hacer vida completamente normal, no quedan restos del virus en su organismo», dijo José Ramón Arribas, jefe de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Carlos III de Madrid.

Romero se contagió del ébola en septiembre al atender en este centro hospitalario a uno de los dos misioneros españoles que fueron repatriados con el virus desde África, quien falleció a los pocos días de ser ingresado.

Según explicaron hoy los médicos, el principal riesgo de contagio de ébola en los países desarrollados es precisamente para los sanitarios que atienden a los enfermos en las fases más graves de la enfermedad.

La enfermera española luchó durante dos semanas por su vida en el hospital de Madrid y fue declarada libre de ébola el 21 de octubre.

Los médicos decidieron mantenerla en aislamiento hasta que eliminara todo resto del virus de los fluidos corporales, lo que los análisis confirmaron el sábado. Desde entonces, está en una habitación normal con la posibilidad de recibir visitas.

Hoy, el equipo que la atendió, formado por unos 100 profesionales, celebró «la gran noticia» de su alta después de un mes que calificaron de «complicado» y en el que hubo algunos «momentos críticos».

Romero recibió varios tratamientos experimentales, entre ellos un antiviral y el plasma de una religiosa que había superado el virus.

«A día de hoy, no podemos confirmar qué ha sido lo que ha curado a la paciente», dijeron los médicos.

Además de la enfermera contagiada, casi una veintena de personas permanecieron aisladas en el Hospital Carlos III de Madrid por haber mantenido contacto con ella desde que tuvo los primeros síntomas hasta que fue hospitalizada. Todos recibieron el alta la semana pasada sin haber contraído el virus.

«Coacciones» y rechazo

Los sanitarios que los atendieron denunciaron hoy «coacciones» y rechazo por parte de algunas personas de su entorno, que pudieron temer contagiarse de la enfermedad.

«El rechazo ha sido brutal entre vecinos, amigos, lo han sufrido los hijos de compañeros en el colegio...», aseguró una de las enfermeras del equipo que atendió a Romero.

Pese a ello, y a que tendrán que vigilar la posible aparición de síntomas y su temperatura corporal, médicos y enfermeros valoraron la experiencia de forma «positiva» y se felicitaron por el buen funcionamiento del equipo y por los resultados.

Ovación a los profesionales sanitarios

La rueda de prensa concluyó con una ovación a los profesionales sanitarios por parte de los periodistas. «Lo más importante de todo es que por fin se ha podido salvar a un caso de ébola, y más importante aún, a una compañera», dijo emocionada una de las enfermeras.

Según los plazos marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y si no aparece ningún otro caso de ébola, el 2 de diciembre se podrá confirmar definitivamente que España está libre del virus.