Al helicóptero de Vigilancia le va la fiesta

SOCIEDAD

La verbena de O Burgo tuvo como estrella una aeronave de prevención de la Guardia Civil

28 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Ni las orquestas, ni las atracciones de feria, ni las dianas y alboradas. El comentario más repetido por los vecinos y visitantes de la fiestas de O Burgo (Culleredo) tuvo como protagonista... un helicóptero. Sí, sí. Una aeronave se convirtió en otra atracción más, puesto que durante las noches de verbena sobrevoló el municipio cullerdense -además de otros limítrofes- anunciando su presencia con su potente foco y el estruendoso ruido de su motor.

Desde luego no pasó inadvertido para miles de residentes en el entorno. Muchos dormían estos días con las ventanas abiertas por el calor y lo que consiguieron fue que, además de la brisa y de algún que otro mosquito, se colase también en sus dormitorios el zumbido del aparato. De hecho, algunos vecinos telefonearon a las policías locales de Culleredo, Cambre u Oleiros para saber qué pasaba, ya que el helicóptero estuvo surcando el cielo hastas altas horas de la madrugada.

«Eran como las tres, no podía dormir y terminé avisando a los municipales de Oleiros, que me dijeron que seguramente se trataba de las fiestas de O Burgo, pero me parecía raro que un helicóptero estuviera dando vueltas a esas horas», explica Berta García, una de las afectadas.

Miguel Lamas, de O Temple, apunta otro conflicto, esta vez de índole melómano, pues el ruido «tampoco es lo mejor -ilustra- para disfrutar de las actuaciones musicales», al irrumpir en medio de los recitales. Y no faltó quien pensó incluso que el aparato formaba parte de las atracciones, como la noria o el barco pirata.

Nada más lejos de la realidad. El helicóptero pertenece al Servicio de Vigilancia y Prevención de la Guardia Civil, y se dedica, entre otras cosas, a evitar altercados en fiestorros multitudinarios de toda Galicia, puesto que desde el aire tiene mejor perspectiva en caso de que haya problemas de todo tipo. Velar por la seguridad de los asistentes es entonces su misión aire durante estas verbenas.

El festival de Ortigueira y otras celebraciones masivas en la comunidad ya han contado con la participación de esta aeronave, que tiene su sede en el aeropuerto de Alvedro y que vigila desde el cielo y a cualquier hora para que todo tenga un final feliz... si no estás durmiendo.