Abarrote en el día grande de Galicia

S. Acosta / X. M. Cambeiro A CORUÑA, SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

Playa de A Lanzada.
Playa de A Lanzada. MONICA IRAGO

Santiago y las playas del sur registraron un aluvión de visitantes durante toda la jornada

26 jul 2014 . Actualizado a las 22:34 h.

Ayer fue el día de los gallegos y Santiago, el epicentro festivo en una jornada maratoniana de eventos y lugares a los que acudir. Turistas y peregrinos abarrotaron el casco histórico compostelano. No cabía ni un alfiler entre las calles empedradas de la capital gallega, encorsetadas de bullicio y vida. Pero el ambiente empezó realmente el día anterior, con los fuegos y la quema de la Catedral, que atrajo a miles de visitantes.

Varios fueron los escenarios clave en la capital de Galicia. Uno de ellos, sin duda, la plaza del Obradoiro. Cerca de tres mil personas se apostaron durante la ceremonia de la ofrenda del Apóstol para vitorear a los Reyes de España. Y eso que los controles policiales no facilitaron el acceso al registrar bolsos, impedir el paso de mochilas y originar grandes colas en la entrada. La propia misa del peregrino provocó inmensas colas de gente deseosas de participar en el acto religioso y de ver en acción el tradicional botafumeiro. También el paseo de la Alameda, con las atracciones, reunió a miles de compostelanos y turistas. Y es que toda Compostela fue un hervidero de gente. El mercado del Amio con la tradicional feria caballar y las propias calles de la ciudad se transformaron en un reguero humano y festivo. En algunas calles, como el Franco, transitar por ellas era una auténtica aventura.

Playas repletas

Más allá de Santiago, la fiesta continuó en Galicia. En el Sur de la comunidad, las playas de la ría de Arosa, Pontevedra y Vigo estuvieron hasta arriba de gente. Los problemas de tráfico que se registraron en los principales accesos a los arenales dieron fe de ello. Sin duda, la playa de A Lanzada congregó a muchos bañistas y es que el buen tiempo animó a los gallegos a disfrutar de una jornada en la arena, sin importar lo fría que estuviera el agua en este enclave especial de las Rías Baixas. Silgar y Baltar, en Sanxenxo y Portonovo, también estuvieron llenas, al igual que los arenales de la Illa de Arousa y Vilanova. Por no hablar de las playas de Cangas y de Moaña que se convirtieron en una auténtica vía de escape para miles de vigueses. Y es que las Rías Baixas registraron altas temperaturas durante toda la jornada que animaron más si cabe el ambiente festivo.

En Vigo, por ejemplo, la conocida Puerta del Sol concentró a numeroso público en la Festa da cultura. También el Festival Intercéltico de Moaña, que contó con la actuación de Luar na Lubre, se llenó de gente.

Pero no solo el sur de Galicia registró abarrote total. La Feira das marabillas en A Coruña ha tenido un rotundo éxito. El casco histórico coruñés se convirtió en otro de los lugares donde no cabía un alma.

Ciudad vieja coruñesa

El éxito de convocatoria de la feria medieval fue tal que resultaba difícil transitar por las calles, atestadas de puestos. Uno de los actos que congregó durante todos estos días a numeroso público fueron las justas medievales que se escenifican en la céntrica plaza de María Pita.

Las terrazas también fueron otro de los puntos de encuentro. El goteo de gente fue constante en los paseos marítimos de las principales zonas turísticas de la comunidad durante todo el día. Y la noche también animó a salir. Fue, sin duda, la guinda para un día perfecto en Galicia.

Información elaborada por las delegaciones de Pontevedra, Arousa, Vigo y Santiago.