Ocho y nueve años de cárcel por la muerte de una niña en directo por webcam

AFP OSLO

SOCIEDAD

Una noruega siguió el consejo de su amante británico de sumergir la cabeza del bebé de 21 meses en agua por haberlos interrumpido durante la conversación en línea

15 may 2014 . Actualizado a las 22:50 h.

Una noruega y su amante británico fueron condenados este jueves en Oslo a ocho y nueve años de cárcel por la muerte de una bebé de 21 meses, fallecida por un castigo infligido en directo por webcam.

La pequeña Hunaina Chaudhry murió después de que su madre Yasmin Chaudhry sumergiera su cabeza en un balde de agua, siguiendo las instrucciones por webcam de su amante Ammaz Omer Qureshi, que estaba en Londres.

El tribunal de Oslo condenó a la pareja de homicidio involuntario, estimando que no tuvo la intención de matar a la niña.

Los hechos se produjeron en Oslo en la madrugada del 3 de octubre de 2010. Según la policía, la niña cometió el fatal error de interrumpir a su madre y a su amante cuando conversaban por video chat.

Para «disciplinarla», su madre le sumergió la cabeza en un balde de agua en dos ocasiones, siguiendo las instrucciones de Ammaz Omer Qureshi.

Cuando la niña perdió conocimiento, su madre llamó a los servicios de emergencia, invocando en un primer lugar un accidente doméstico. La menor murió de un edema cerebral al día siguiente en el hospital.

La pareja fue condenada también por maltrato.

Durante sus últimos seis meses de vida, la madre de la víctima multiplicó los malos tratos contra la menor, forzándola por ejemplo a ingerir una cuchara con picante, amarrándola con papel adhesivo, bañándola con agua fría, y obligándola a dormir en el suelo, con el objetivo de «disciplinarla».

Las condenas pronunciadas son menos severas que los 16 y 18 años de cárcel solicitados por la fiscalía contra la madre y su amante.

Los jueces estimaron que los acusados merecían ambos nueve meses de cárcel, el amante por haber sido «el motor» y la madre la «ejecutante», pero le concedieron a la madre una disminución de un año por haber cooperado con la policía.