Bertone no ve en Francisco una revolución, sino «una continuidad con Benedicto XVI»

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SOCIEDAD

El papa en su adiós al cardenal Bertone.
El papa en su adiós al cardenal Bertone. osservatore romano < / span>efe< / span>

El cardenal dejó oficialmente su cargo como Secretario de Estado, que será ocupado desde ahora por su sucesor Pietro Parolin

16 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El papa Francisco agradeció ayer al cardenal Tarcisio Bertone, que dejó su cargo como Secretario de Estado, «el valor y la paciencia» con las que ha vivido las adversidades que ha tenido que afrontar, mientras el purpurado exaltó los valores del papa Benedicto XVI en su discurso.

«Querido cardenal Bertone; en este momento me gusta pensar que aunque ha habido espinas, la Virgen no le ha hecho faltar nunca su ayuda y tampoco lo hará en el futuro. Esté seguro ¿eh?», subrayó el papa en su mensaje de despedida al Secretario de Estado.

El acto significó el fin de la era del poderoso Tarcisio Bertone y la toma de posesión de su sucesor Pietro Parolin, quien asumió el cargo en ausencia, ya que se encuentra recuperándose de una leve operación. El jefe de la Iglesia destacó cómo Bertone ha trabajado «con profundo amor a la institución, generosidad, y esa típica mezcla salesiana que une el espíritu de obediencia y una gran libertad de iniciativa e inventiva personal».

Palabras de reconocimiento del papa argentino a Bertone, que ha vivido los últimos meses de su cargo salpicado por el escándalo de las filtraciones, el llamado Vatileaks, en los que se le acusaba de mala gestión y abuso de poder. Aunque no estuvo presente Parolin, de 54 años, el papa valoró que éste «conoce muy bien a la familia de la Secretaria de Estado, ya que trabajó con ellos muchos años».

Parolin llega a un cargo cuyas competencias sufrirán variaciones debido a la reforma curial que ha acometido el pontífice tras las peticiones de los cardenales antes de la celebración del cónclave.

Por su parte, Bertone, tras agradecer las palabras del papa, dijo que el pontífice no supone tanto «una revolución sino una continuidad con Benedicto XVI aunque con diversidad de acentos y de vida personal». Para el secretario saliente, Benedicto XVI ha sido un reformador de la conciencia del clero que «ha sufrido profundamente por los males que han desfigurado el rostro de la Iglesia». Exaltó Bertone al anterior pontífice por «la valoración de la común identidad cristiana de los hermanos de otras iglesias y comunidades; el diálogo teológico con los judíos y musulmanes, que han hecho de la Iglesia un interlocutor buscado y apreciado».