Cuentos de los hermanos Grimm: 200 años de la publicación de sus cuentos

La Voz

SOCIEDAD

Las historias del folclore y la tradición oral de la región de Hesse se han convertido en clásicos universales

20 dic 2012 . Actualizado a las 20:55 h.

Los cuentos de los hermanos Grimm cumplen hoy 200 años desde la publicación de su primera edición el 10 de diciembre del año 1812. Se trataba de una recopilación de historias de la tradición oral de la región de Hesse, en cuya capital Kassel residían ambos hermanos.

Su interés por este tipo de historias así como por la filología y el folclore nacional nació como derivado del movimiento romántico centroeuropeo por el que se vieron influenciados alrededor de los años 1803 - 1805. En la Universidad de Marburgo conocieron a Clemens Brentano y Achim Von Arnim con quienes descubrieron el movimiento y su interés hacia la recuperación de aspectos tradicionales de su cultura, marcados por la oscuridad y los sentimientos trágicos.

Los cuentos que empezaron a recoger y editar dificilmente podían ser cuentos infantiles, ya que contenían episodios sexuales, violentos y oscuros. Estos dos licenciados en derecho empezaron en el año 1806 a recoger sus historias en un contexto de la primera expansión Napoleónica europea, desde un ambiente pequeño burgués de influencia religiosa de los Hugonotes. Las dos partes de los cuentos, publicadas en 1812 y 1814 no tuvieron demasiado éxito de acogida por una población marcada por la guerra que no quería leer historias atroces narradas con la riqueza y complejidad de un uso filológico del lenguaje. Una posterior dulcificación e inclusión de ilustraciones hicieron que historias como La Cenicienta, Blancanieves, Hänsel y Gretel, La Bella Durmiente o Pulgarcito se hiciesen más populares empezando a servir como cuentos para niiños. Paradójicamente, y a pesar de nacer por su amor por las historias orales populares, este éxito fue desplazando a la versión oral que aún seguía viva en muchas zonas.

En estas versiones originales muchos de los pasajes difícilmente podrían haber servido como diversión a los niños. Uno de los más conocidos de los cuentos de los hermanos Grimm es Caperucita, presenta al lobo como una figura que encarna la representación de diferentes males y tabús. Un animal que seduce y corrompe la inocencia de la niña, proponiéndole mantener relaciones sexuales para posteriormente ofrecerle la carne de su abuela como alimento (la fagocitación de la figura rectora y ancestral de la familia como complemento a la tentación de los placeres sensuales). Esta compleja simbología fue adulterada y simplificada hasta terminar convirtiéndose en un amable relato con final feliz (cómo puede si no la abuela concinuar viva tras ser comida por el lobo).

También la figura de la madre tanto en Hansel y Grettel como en Cenicienta se transformó en madrastra pa restar crudeza a las crueldades a que eran sometidos los niños por su propia madre. La de los primeros induce al padre a abandonarlos en el bosque mientras que la de la segunda ve amenazada su posición en el ámbito sexual por su hija por lo que trata de asesinarla. En Rapunzel, las visitas del príncipe al torreón no eran tan castas como ahora aparecen, con la marcada simbología sexual del cabello como elemento canalizador y posibilitador de estos encuentros.

Tras la primera edición de los cuentos en 1812 hubo una segunda en 1819 y sucesivas (1822, 1840, 1843...) que si fueron teniendo un mayor éxito tras los cambios efectuados para la segunda edición por Wilhem Grimm.