Cifran el paro en más de un 75 % y Educación lo reduce a un 23 %
19 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.De «éxito rotundo» y «jornada histórica» a un seguimiento discreto. El tradicional baile de cifras se ha acentuado a la hora de cuantificar el seguimiento de la huelga en enseñanza secundaria, a la que ayer, en el tercer día de movilizaciones, se sumaron los padres de los alumnos de primaria, que no enviaron a sus hijos a clase. Mientras que para los convocantes, el Sindicato de Estudiantes y la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres (Ceapa), el paro tuvo un seguimiento del 80 %, para el Ministerio de Educación el respaldo se reduce a un 23 %. En Galicia, la Xunta no ofrece datos y se remite a las cifras del Gobierno, mientras que la Confederación de Federaciones de Padres y Madres de Alumnos de Galicia (Confapa) ha registrado una participación en las movilizaciones del 75 % en primaria y del 90 % en secundaria. «A resposta dos pais foi moi positiva e moitos máis expresaron o seu apoio a folga, aínda que tiveron que deixar aos seus fillos no colexio por problemas de conciliación», subrayó la presidenta de la Confapa, Helena Gómez.
La adhesión a la convocatoria obtuvo más respaldo en zonas rurales y municipios medianos que en ciudades como A Coruña y Santiago, en las que la incidencia fue menor, al contrario que en otras como Ourense o Pontevedra. Un sondeo realizado por las delegaciones de La Voz refleja la gran desigualdad que tuvo la huelga, especialmente en Primaria, aunque con un amplio respaldo. Así, hubo colegios en las comarcas de Barbanza, Arousa, Pontevedra y Vigo en los que más del 95 % de los niños faltaron a clase, mientras que en otras zonas como la Costa da Morte o Deza y Tabeirós la participación fue testimonial.
Uno de los centros con un seguimiento masivo fue el Eusebio Lorenzo Baleirón, de Dodro, en el que el 95 % de los alumnos de Primaria y el 93 % de los de Secundaria no fueron a clase. En otros siete colegios de Vigo la actividad lectiva fue nula.
Manifestaciones
Tanto en Galicia como en el conjunto de España la jornada de huelga se saldó sin apenas incidentes. El único llamativo fue el asalto a un colegio de Mérida por parte de un grupo de alumnos, una acción que denunciaron tanto los padres como los sindicatos y que aprovechó la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomedio, para arremeter contra una protesta que supone «una vuelta al pasado», «una pretendida lucha antifranquista a favor del socialismo fuera de lugar en esta sociedad».
La jornada concluyó ayer con manifestaciones en A Coruña y Vigo, aunque la central se celebró en Madrid. En ella, los padres pidieron la dimisión del ministro de Educación, José Ignacio Wert, al que acusaron de «incendiario».