La tribu «hardcore» acampa en Viveiro

La Voz

SOCIEDAD

PEPA LOSADA

El festival Resurrection Fest transforma la ciudad con la llegada de miles de «heavies» de toda Europa

03 ago 2012 . Actualizado a las 22:16 h.

El Resurrection Fest, que comenzó ayer en Viveiro, no es un festival cualquiera. Se espera que a los conciertos, que se prolongarán hasta el domingo, asistan unas 30.000 personas. Tres días a reventar, y con un objetivo concreto: vibrar al ritmo de los sonidos más duros de hardcore, punk y metal. La tribu heavy ha tomado Viveiro con buen rollo, y eso se nota y se agradece en estos tiempos. Se estima que el festival genera un movimiento económico de 1,4 millones de euros.

Miles de almas resus procedentes de toda España y otros países como Francia o Portugal, abarrotan desde el miércoles el parque de Pernas Peón, en Covas. El cartel lo justifica: Suicidal Tendencies, At the Gates o Dead Kennedys arrastran multitudes. Unos se conforman con una tienda de campaña y un saco de dormir. Otros se permiten el lujo de instalar su parrilla para cocinar. También hay heavies de hotel de lujo que cambian la chaqueta por la cresta. La familia punk es variopinta: en grupo o en pareja, con tatuajes o no, vestidos de hawaianos o de romanos. No importan ni el atuendo ni las apariencias; en el Resurrection lo único relevante es el buen rollo. Y con esta premisa los resus iniciaron ayer su peregrinación a Lavandeiras, en Celeiro, lugar donde se encuentra el recinto del festival.

Son 24.000 metros cuadrados, 64 bandas y tres escenarios. Números que explican el tirón de una cita de renombre internacional. Una joven de Zaragoza, entre trago y trago a su cerveza, resumía un sentir que parece general: «Yo vengo aquí a pasarlo a tope y a estar con mis colegas de toda España».

jamila gonzález