El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, defendió ayer que las adolescentes de 16 y 17 años puedan abortar sin el consentimiento de sus padres para evitar que estos tengan una «interferencia determinante» en una decisión que, insistió, debe ser «libre e íntima».
Zapatero defendió uno de los puntos más criticados del anteproyecto de ley del aborto elaborado por el Gobierno y apostó por tener «confianza en nuestros jóvenes».
Tras decir que los «expertos» y la mayoría de la legislación europea fijan la edad en 16 años, se mostró convencido de que será «una excepción» la joven que opte por no informar a sus progenitores de su situación. «Hagamos caso a los expertos, a la experiencia europea, y tengamos confianza en los jóvenes, en las mujeres. No privemos ni interfiramos en la libre decisión», añadió.