El líder de Equanimal pidió ser atendido en el hospital tras arrebatarle la Guardia Civil un megáfono en el campo
28 ene 2008 . Actualizado a las 02:00 h.La tensión marcó ayer la quinta Copa España de Caza de Zorro celebrada en Portomarín (Lugo) y concellos limítrofes al protagonizar cazadores y ecologistas distintos incidentes durante las batidas. El director de la Fundación Equanimal, Eladio Ferreira, fue detenido durante uno de los seguimientos que los opositores a este tipo de competiciones realizaron a las distintas cuadrillas, tratando de espantar a los animales y boicotear las batidas. Los colectivos enfrentados cruzaron denuncias por coacciones y amenazas en el monte, y al final el colectivo Matar por Matar, Non se manifestó en Portomarín, justo donde otros años eran expuestos los zorros cazados y que esta vez fueron llevados con sigilo al vecino mercado ganadero de Paradela para ser contados y examinados a puerta cerrada.
Hasta los tecores de Portomarín, Guntín o Taboada, llegaron de madrugada 900 cazadores de toda Galicia con perros para desplegarse en 100.000 hectáreas y durante la noche arribaron desde O Carballiño, Vigo, Madrid o Bilbao cien ecologistas en coches y autobuses para hacer suficiente ruido como para impedir a las cuadrillas unas «matanzas» de raposos justificadas en base a censos inflados y cupos amañados con los que nunca se abatieron tantos animales.
Aunque en un primer momento las escopetas y megáfonos compartieron una tensa calma, al despejar la niebla e iniciarse los recorridos de caza campo a través, el inicial «eles teñen a súa idea, e nós a nosa» dio paso a incidentes verbales. La cuadrilla número 26 llegada de Carballo enseguida reclamó la presencia de la Guardia Civil ante la presión de los activistas en defensa de los zorros y el no poder cazar tras haber pagado la inscripción en este último campeonato de la temporada. Los jóvenes fueron identificados por los agentes y, a su vez, requirieron la presencia de la fuerza pública para que identificaran a cazadores a los que acusaron de amenazarlos, arma en mano, si no dejaban de seguirlos.
Varias dotaciones y un capitán de la Guardia Civil se personaron en Sabugueira (Taboada) conminando a los ecologistas a cejar en la presión sobre la batida autorizada, a permanecer en los caminos públicos y no utilizar megáfonos o silbatos.
Resistencia a la autoridad
Al parecer, por desoír esta advertencia, al director de Equanimal le fue retirado el megáfono, siendo detenido por supuesta resistencia a la autoridad. Fue conducido a la Comandancia de Lugo pero antes pidió ser trasladado en ambulancia al hospital, quejándose de dolor en el costado y en una mano. Otro agarrón en la parroquia de Xiá motivó la queja por parte de un defensor de los derechos de los animales. Idoia Echevarría y Jennifer Alvarado, también de Equanimal, denunciaron un intento de arrollarlas en un camino con un todoterreno; otros, incluso tiros al aire. Los cazadores interpusieron denuncias por los estorbos, y su presidente, José María Gómez Cortón, dijo: «Unha cousa é o dereito de manifestación e outra o sabotaxe ás persoas que cazan dentro da lei, en base a uns informes técnicos e plans que hai cumprir, aparte dos malos modos, e as pintadas que se poden ver nas casas dos veciños de Portomarín onde se nos acusa de asesinos». En Portomarín, los ecologistas gritaban: «Menos escopetas e máis bibliotecas».