Fábricas de títulos falsos ofrecen en Internet diplomas por 250 euros

SOCIEDAD

01 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

Por 250 euros cualquiera puede convertirse en licenciado en apenas unas horas, aunque el documento que así lo acredite será ficticio. Fábricas de títulos falsos que campan por Internet empiezan a operar en España y ya incluyen en sus catálogos de diplomas los modelos pertenecientes a universidades como Santiago de Compostela y Vigo. Las dos universidades gallegas figuran entre numerosas instituciones españolas, que van desde la Autónoma de Barcelona a la Complutense de Madrid, y otras internacionales, como las mismísimas Harvard (Estados Unidos), Oxford y Cambridge (Reino Unido).

El Observatorio de Internet ha dado la voz de alarma acerca de esta práctica ilegal en la que delinque tanto el que proporciona el diploma como el que lo solicita. El anonimato que proporciona Internet y el carácter delictivo del procedimiento hacen que no existan denuncias ni datos acerca de cuántas personas pueden haber utilizado estos servicios. El director de este centro, Francisco Canals, subraya en su informe que las ofertas y el envío de mensajes que invitan a dejar de estudiar y hacerse un título a medida proliferan en estos meses de comienzo del curso, lo que hace importante aumentar la precaución por parte de los usuarios.

Según fuentes del Observatorio de Internet, hay fábricas de títulos falsos de diversos tipos, desde algunas realizadas por simples aficionados a otras de carácter más profesional, capaces de copiar los originales de forma fiel, con sello incluido, y de brindar al comprador la posibilidad de elegir entre cientos de universidades del mundo y un número ilimitado de especialidades.

«Existen incluso mecanismos de verdadera ingeniería en los que, por medio de falsas ofertas de trabajo, se pide a la gente que envíe sus currículo con copias de los títulos verdaderos, copias que después revenden a terceras personas», afirman.

Universidades ficticias

Pero el fraude educativo a través de Internet no se limita solo a aquellos que, de forma consciente, compran un título que no poseen. También proliferan las universidades ficticias, que, según señaló la Unesco el pasado año, son ya cerca de 800.

Este tipo de delito consiste en crear una página que es clónica de otra perteneciente a un centro de estudios auténtico. De esta forma, muchas personas llegan a matricularse en ella, y pagar allí sus cuotas correspondientes, pensando que lo están haciendo en la universidad real. Es el llamado cibersquatting .

El Observatorio de Internet señala que hay aproximadamente 350.000 españoles que corren el peligro de ser engañados, ya que esta es la cifra de estudiantes que cada año contratan algún tipo de curso a distancia a través de la Red. De los 1,5 millones de universitarios que existen en España, uno de cada ocho ya estudia a distancia a través de Internet.

Para no caer en estas redes dedicadas a la estafa, los expertos recomiendan ser crítico con todo lo que se oferta en la Red y fundamentalmente confirmar los datos del centro educativo en el que se matriculan por otro medio ajeno a Internet, por ejemplo el teléfono. El primer signo que debe llevar a desconfiar, dicen, son los centros educativos que dan muchas facilidades, que ofrecen obtener un diploma en apenas un mes o en los que no es preciso tener aprobada la selectividad ni otros créditos acumulados.