Arranca la última selectividad

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SELECTIVIDAD

Marta Carballo / Marco Gundín

Un total de 2.676 jóvenes se examinan desde hoy en diez localidades gallegas

14 sep 2016 . Actualizado a las 17:19 h.

A las diez de la mañana arranca el último examen de Lengua Castellana y Literatura de la selectividad gallega. A lo largo de tres días un total de 2.676 estudiantes, distribuidos en diecinueve centros de diez localidades diferentes, se enfrentan a las que oficialmente se conocen como las pruebas de acceso a la universidad, aunque la mayoría de la población siga llamándolas selectividad. Hoy es el turno de los ejercicios comunes a todos los examinados. Los alumnos comenzarán a las diez con Lengua Castellana; seguirán con Historia de España o Historia de la Filosofía; y por la tarde tendrán otras dos lenguas, Lingua Galega e Literatura y finalmente Lengua Extranjera. A partir de mañana se realizan las pruebas específicas de cada modalidad, mientras que el viernes la selectividad se celebra solo en jornada de mañana.

Galicia, la más tardía

Galicia es la comunidad que da el carpetazo a esta prueba en España. Algunas autonomías ya la realizan en julio, y de las que todavía la conservan en el mes de septiembre, la gallega es la más tardía. Pero aunque se termine este filtro para acceder a las facultades, su espíritu se mantendrá. Al llegar los rectores y el Ministerio de Educación a un acuerdo para que la reválida de bachillerato sirva como prueba de acceso a la universidad, finalmente acabará siendo muy similar a la tradicional selectividad. La principal diferencia es que el nuevo examen es indispensable para obtener el título de bachillerato, mientras que la actual solo condiciona el acceso a la universidad.

Esta misma semana el rector de Santiago, Juan Viaño, explicaba que la reválida «non vai ter gran diferenza coa actual selectividade», mientras que su homólogo en A Coruña, Julio Abalde, insistía en la necesidad de transmitir certidumbre y tranquilidad a las familias «para que as probas novas se fagan sen cambios drásticos sobre a actual».

El porcentaje de aprobados en la selectividad se ha ido elevando en los últimos años. Un ejemplo: en el año 1989 aprobaron en España el 70 % de los estudiantes presentados, frente al 86 % del 2013. En Galicia la convocatoria de junio ronda el 90 % de aptos; mientras que la de septiembre se acerca al 60 %. El problema no es de hecho pasarla, sino lograr la nota suficiente para acceder al grado elegido. Este curso, y tras cinco períodos de matrícula, hay ya 70 grados en los siete campus cerrados a los alumnos de septiembre, por lo que los estudiantes deben conformarse con alguno de los noventa restantes.

Cambios en 40 años

A lo largo de estos cuatro decenios la selectividad ha sufrido cambios. Por ejemplo, su peso en la nota final es actualmente del 40 %, y el otro 60 % se corresponde con la media del bachillerato. Hace años el peso del selectivo llegaba al 50 %. La última reforma importante fue la del 2010, en la que se dividieron las pruebas de acceso a la universidad en dos fases, una general, obligatoria para todo el mundo y que consta de cinco exámenes -cuatro comunes y uno propio de la modalidad elegida-, y una específica, en la que el alumno puede examinarse de hasta cuatro materias para subir nota, y de la que se eligen las dos mejores calificaciones. Además, la puntuación pasó de ser sobre 10 a ser sobre 14.

Pendientes de la Lomce

Una de las incertidumbres de la nueva reválida es su pervivencia, ya que se trata de una prueba que incorpora la Lomce y que pende de un hilo, pues todos los partidos de la oposición quieren paralizarla. Eso sí, llámese selectividad o reválida, probablemente los alumnos no se libren de pasar un filtro para entrar en la universidad.

Sube la matrícula en secundaria y se sitúa ya a niveles del año 2009

Las aulas de los institutos gallegos volverán a llenarse a partir de mañana con el inicio de curso en secundaria, bachillerato, formación profesional y en las enseñanzas de régimen especial. Este curso comienzan las clases 89.940 estudiantes de secundaria; 31.632 de bachillerato; 13.568 de enseñanzas especiales; 11.447 de estudios artísticos y deportivos; y unos 50.627 de ciclos formativos. En casi todas las etapas se produce un aumento en la matrícula, lo que sitúa a la comunidad gallega en cifras semejantes a las del año 2009. Eso sí, el espejismo no durará mucho. Infantil y primaria están sufriendo ahora el descenso demográfico derivado de la crisis económica, por lo que en unos años llegará también a las aulas de secundaria.

De los casi noventa mil estudiantes de la ESO, 63.538 acuden a centros públicos, 24.594 a colegios concertados y el resto a centros totalmente privados. En bachillerato la proporción de los que van a institutos públicos es mucho más elevada, ya que es una etapa en la que no hay conciertos. De los 31.600 estudiantes, casi 27.000 estudian en la enseñanza pública.

En cuanto a la formación profesional, aunque todavía no se ha cerrado el plazo de matrícula, cursarán estudios más de 50.000 alumnos en todas las modalidades -ciclos ordinarios, de FP básica, FP dual o a distancia-, lo que supone más de un 2 % de incremento en relación al curso pasado. Aun con cifras inferiores a otros países de la UE, Galicia es una de las comunidades en donde más alumnos se decantan por la FP.