Hospitalizada otra mujer que se cayó en la calle por el mal estado de la acera

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

VAL DO DUBRA

CEDIDA

Se rompió un brazo y un pie al pisar unas baldosas sueltas en República do Salvador

24 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El pésimo estado de conservación de muchas calles de Santiago ha vuelto a tener graves consecuencias. Son varios los casos de viandantes lesionados por pisar baldosas sueltas que ya ha habido que lamentar, pero el de Beatriz Capelo, una vecina de Bembibre (Val do Dubra), es de los más graves. El pasado miércoles, sobre las 13.30 horas, bajaba por la calle República do Salvador en dirección a la Praza Roxa cuando a la altura del número 26, entre la administración de loterías y el supermercado de la empresa Carrefour, cayó al suelo al pisar en una zona en la que el pavimento público está en muy malas condiciones.

El resultado fue grave. Al pisar en las baldosas sueltas, el pie se le hundió al tiempo que giraba, lo que le hizo perder el equilibro. En la caída se golpeó la cabeza y quedó semiinconsciente, pero lo peor son las lesiones que se produjo en el brazo, la pierna y el pie izquierdos, con fisuras y roturas de varios huesos.

En el momento en el que se produjo la caída, Beatriz Capelo iba acompañada de su hija de cuatro años. La niña acababa de graduarse la vista y le habían echado gotas para dilatar las pupilas, por lo que no veía muy bien y se asustó muchísimo al ver a su madre en el suelo. «Miña muller quedou medio inconsciente e os que foron a axudarlle querían chamar, loxicamente, a unha ambulancia, pero a pequena empezou a chorar e por non darlle máis susto de ver como unha ambulancia levaba a súa nai ao final chamáronme e fun eu a buscala e leveina ao Hospital Clínico», explica José Ramón Cancela, esposo de la lesionada.

En urgencias tuvieron que esperar largas horas hasta que les atendieron y no salieron del hospital hasta las nueve de la noche, entre otras cosas porque a la mujer hubo que hacerle varias pruebas y curas. «Contamos con que estea dous ou tres meses de baixa. Ademais, xusto o brazo que rompeu é o esquerdo e ela é zurda, así que aínda o pasará peor», explica Cancela, que tiene una empresa de construcción en la que está contratada su esposa.

Tanto Cancela como su mujer están indignados y no entienden cómo las aceras de Santiago pueden estar en tan mal estado. Por ello, ayer mismo tenían previsto acudir a la Policía Local para presentar una denuncia y reclamar al Concello por los daños y perjuicios ocasionados.

La polémica de los vados

Sin saberlo -por ser de Bembibre-, Capelo ha sido víctima de la polémica originada por el gobierno local de Compostela Aberta, que preside Martiño Noriega, al intentar, por primera vez en cuarenta años de democracia, que sean los vecinos los que reparen los desperfectos de las aceras en las zonas de acceso a los garajes, que son las más dañadas.

Esta inédita decisión recibió no solo unánimes críticas de los vecinos y de todos los grupos de la oposición, sino que también prestigiosos juristas dudaron de su legalidad por ser las aceras bienes de dominio público y, por tanto, competencia exclusiva de los concellos. El tramo de acera en el que se cayó Beatriz Capelo es, precisamente, uno de los que el Ayuntamiento se desentendió y pretendió que fuese la comunidad de propietarios del edificio la que lo reparase, a lo que se negó. Finalmente, Compostela Aberta ha dado marcha atrás en su pretensión, pero las aceras siguen sin arreglarse.