«¿Os da luz?... Por aquí non pasan nin os da caridade»

Emma Araújo SANTIAGO / LA VOZ

TEO

xoán a. soler

La parroquia de Oza, en Teo, sufrió los efectos del temporal con numerosas familias sin luz hasta la tarde-noche de ayer lunes

07 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La parroquia de Oza, en Teo, ha sufrido especialmente los efectos del temporal, sobre todo en el núcleo de Vilanova, en donde a media tarde de ayer aún había vecinos sin suministro eléctrico. Una de ellas es Lali Barros Gamas, que tiró de generador para preservar todos los alimentos que tiene congelados. «O ruído é insoportable, pero é peor que todo se perda». Así resume su vida desde el jueves, cuando se fue la luz. Poco antes de que el suministro llegase a su casa, Lali no lo tenía nada claro, sobre todo por el mutismo que ella y su familia se encontraron al otro lado del teléfono cada vez que llaman pidiendo información o un servicio técnico. «¿Os da luz... por aquí non pasan nin os da caridade», responde para explicar la sensación de abandono que tienen todos en situaciones como esta.

Lali no es la única que ayer estaba a oscuras en Teo. La actriz Paula Carballeira tira de candil cuando está en casa y de los amigos para comer y para relacionarse con el mundo.

Cerca de su casa, Rafael Carbajales coge el móvil en su coche, ya que utiliza su batería para recargar el teléfono porque en su domicilio no hay luz. Sufre los daños por partida doble. Vive en A Estrada, pero trabaja en Oza, en donde está su granja, Eo dos menecos, dedicada a la cría de gallinas y gallos de Mos. El apagón hizo una escabechina en su negocio, ya que las incubadoras dejaron de funcionar y perdió trescientos huevos.

«Un huevo vale un euro, un pollito recién nacido, tres y uno de un mes, ocho», se lamenta. Ahora necesitará semanas para producir de nuevo.

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