Premios

Cristóbal Ramírez

SANTIAGO CIUDAD

23 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El segundo Certamen Internacional de Investigación del Camino Inglés, convocado por el Concello de Oroso, ya tiene ganadores. Y lo más relevante no reside en la calidad de los trabajos, que, como siempre, es variada. Ni siquiera en que la ganadora absoluta saque a la luz una peregrina británica del siglo XVI de la que no se tenía noticia alguna. Lo importante de verdad es la procedencia de los trabajos premiados.

Y en ese mapa figuran Alicante, O Pino, Ferrol, Santiago, Valencia, Madrid, Brasil y, buena noticia puesto que ahí está la cabeza del Camino Inglés, la británica ciudad de Durham. Es decir, el abanico que ya se detectaba el año pasado (Lancaster ?Inglaterra- y Dublin ?Irlanda incluidos) se consolida este. El certamen empieza a adquirir peso.

A su vez, ello implica dos cosas: una, que está siendo conocido en lugares bien lejanos, producto del paso constante de peregrinos extranjeros por esa ruta jacobea; y otra, que hay materia para investigar. No sólo por el hecho de que haya servido para resucitar a una peregrina de la isla de Wight (donde aquel famoso concierto hippy en el mítico 1968), sino porque hay temas, personas y episodios varios que aún permanecen en el más puro olvido.

El desafío ahora es buscar aliados para promocionar de manera constante el Camino Inglés. Desde hace años está paralizada -o en el limbo de los justos- una entidad, asociación o como quieran llamarla, que debería agrupar a los 18 concellos beneficiados por el paso de los peregrinos y permitir acciones comunes. Es hora de que alguien dé un puñetazo en la mesa (bien fuerte) y echar a andar. Y el que se quede atrás, que corra si quiere. Él se lo perderá.