«Co potencial museístico que temos, dá mágoa que os turistas non queden máis»
SANTIAGO CIUDAD
El director de la Casa da Troia tomó el testigo de su padre por «obriga moral e por gusto»
21 may 2017 . Actualizado a las 22:40 h.Los compostelanos de los años 70 y 80 recuerdan con cierta sorna aquellos carteles que empezaban a aparecer entonces colgados de las ventanas de muchos pisos del Ensanche, y que rezaban: «Se vende. Amor». Y es que Amor era la agencia inmobiliaria que Benigno padre gestionó casi hasta sus últimos días junto a su hijo, del mismo nombre. La agencia no fue el único legado que asumió el segundo Benigno de la familia Amor. También recogió el testigo de la obra cultural de su padre, el Museo de la Casa da Troia. «Non me prantexei substituír ao meu pai, non sería posible. Pero cando me dixeron que fora eu o director, non quixen negarme. Primeiro por unha obriga moral, pero tamén porque gústame moito a Casa e todo a que a rodea», explica Benigno.
La Casa da Troia es uno de los muchos museos que pueden visitarse en Santiago, pero tiene unas características que la hacen especial. «Cando meu pai e outros amigos puxéronse coa Casa, non tiñan nada. Os mobles da sala son os da sala de Jacobo Gil Villanueva, que sae na novela e que tiña a súa casa no Toural», recuerda. Aunque su padre fue uno de los principales promotores del museo, y sin duda el más activo, los miembros de la Asociación de Antiguos Tunos Compostelanos «movéronse moito para ter o financiamento para mercar mobles e por en marcha a casa». Aún hoy, a los antiguos tunos y amigos de la Casa da Troia se les debe que el museo pueda abrir sus puertas desde su inauguración el 27 de febrero de 1993. En los últimos años, la Casa solo está disponible en los meses centrales del verano, pero este año, precisa Amor, «fixemos un esforzo e xa está aberta dende Semana Santa, e seguirá aberta ata o fin do verano».
El Museo de la Casa da Troia participa estos días en las celebraciones por el Día Internacional de los Museos, y lo hace con unas visitas dramatizadas de las que se pudo disfrutar las noches del jueves y viernes con la figura de «Barcala, outro dos personaxes da novela de Pérez Lugín, representado polo actor Suso Martínez», indica. El resto de los días, los visitantes pueden conocer «a historia da casa, e tamén a historia da USC a través da casa e dos tempos en que escribiuse a novela, porque temos dous visitas guiadas diarias». Benigno considera que un recorrido por la Casa da Troia también sería una buena idea para los niños de los colegios, porque «aínda que os estudantes da casa eran, na aquela época dunha elite. Non tiñan que traballar, pero moitos tiña que empeñar os libros para acabar o mes. Coido que pode ser unha lección de sacrificio e esforzo».
Benigno siente cierta «mágoa, porque Santiago ten un gran potencial museístico. Non falo só da nosa Casa, falo dos moitos museos que ten a cidade. Museos de grande calidade, que ben promocionados poderían servir para que os turistas queden máis tempo en Santiago», lamenta.
La Fundación de la Casa, de la mano del historiador Fernando Reyes, está trabajando en un trabajo de investigación para recopilar partituras de canciones y piezas musicales de la época de la novela y que forman parte del repertorio de las Tunas. La idea es que en un par de años, la Tuna Compostelana pueda grabar un disco con estas canciones, que iría acompañado de un libro de la historia de la propia Tuna y, por tanto, de una parte de la historia de la USC. Otro de sus proyectos es ofrecer conciertos didácticos en los colegios para promover la cultura musical, y «recuperar aquelas rondallas escolares que foron a canteira das tunas».
Perfil. Benigno Amor es el director de la Casa da Troia desde hace siete años, cuando tomó el testigo dejado por su padre.
Casa da Toia. Abierta entre las 11 y 14 horas y de 16 a 20 horas. Todos los días hay dos visitas guiadas por el interior de la Casa para grupos de diez a quince personas.