El 9 de noviembre puede llover, pero no tanto como el 14 de octubre de 1987, el más lluvioso en Santiago
SANTIAGO CIUDAD
Docobo dio a conocer datos curiosos de los 26.000 registros meteorológicos recogidos por la USC
03 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La celebración de los 35 años de colaboración entre el observatorio astronómico de la USC y la Agencia Estatal de Meteorología propició que el profesor José Ángel Docobo impartiese ayer en la Facultade de Matemáticas una conferencia en la que dio a conocer datos históricos y curiosos de los registros obtenidos en el centro, un muestreo que se llevó a cabo de forma ininterrumpida desde que nació esa alianza con el Instituto Nacional de Meteorología y que se tradujo en más de 26.000 observaciones meteorológicas que ayudaron a conocer e interpretar los datos del tiempo en Compostela.
Algunos de esos registros más curiosos los dio a conocer ayer el profesor, que lleva en la USC desde 1981 y que recibió el encargo del rector Suárez Núñez de recuperar el viejo observatorio universitario, un servicio pionero que ya se había puesto en marcha en 1849 en la terraza del edificio de la actual Facultade de Xeografía e Historia.
El 9 de noviembre del 2017, por ejemplo. Es muy probable que ese día llueva, pero no porque Docobo tenga una bola mágica que pueda adelantar el registro de la jornada, sino porque la probabilidad es muy alta teniendo en cuenta los registros de esos 35 años, en los que consta que en esa fecha llovió en 29 de los 35 años de los muestreos. Si estaba previsto celebrar un acto al aire libre y ese dato desmotiva a los convocantes, tampoco es buena idea adelantarlo al 2 del mismo mes, porque ese día llovió en 28 de los 35 registros posibles, con más de un 80 % de probabilidades en ambos casos.
En todo caso, en ninguno de esos días de noviembre llovió tanto como el 14 de octubre de 1987, el día más lluvioso en Santiago con 137,9 litros por metro cuadrado. Pero entre 1982 y 2017, el día que acumuló más agua fue el 21 de octubre, con un total de 579,2 litros. Hubo, además, meses en los que llovió todos los días -una realidad habitual en Galicia-, como ocurrió en diciembre del 2000, en enero del 2014 y en noviembre de 1997. En total, llovió una media de 180,7 días al año, que supone casi la mitad de los 365 oficiales del calendario. Como el centro mide también las temperaturas, horas de sol y otros aspectos, Docobo sacó también a colación la jornada más calurosa -el 20 de julio de 1990, con 40,3 grados- y la más fría -el 9 de enero de 1985, con 4,3 grados en negativo-.
Acto en Matemáticas
Al acto de conmemoración de esos 35 años de colaboración acudió también, en nombre de la Agencia Estatal de Meteorología, José Antonio García-Moya, que pronunció la conferencia Los modelos numéricos de predicción del tiempo. Pasado, presente y futuro. La jornada se desarrolló en el aula magna de la Facultade de Matemáticas, presidida por Juan Viaño.