Raxoi activa por fin la reapertura de las cafeterías de la estación y el Auditorio

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

XOAN A. SOLER

El concurso para adjudicarlas está en marcha y la central de buses ya tiene una oferta

18 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace unos meses fue el BNG el que preguntó por el prolongado cierre de las cafeterías de la estación de autobuses y del Auditorio de Galicia, y ayer fue el Ateneo de Santiago el que recordó que ya hace un año que se dirigió al Concello de Santiago para reclamar la reapertura de la cafetería del Auditorio, dado que muchos socios suyos son asiduos a los conciertos de la Filharmonía y de otros espectáculos. Como pasaron doce meses sin respuesta ni solución, la directiva del Ateneo envió la semana pasada un segundo escrito al alcalde recordándole la petición y reprochándole lo que les parece «un certo desinterese por pór en funcionamento un servizo imprescindible que dea resposta ás necesidades sentidas polos asistentes e visitantes ao devandito centro cultural».

Pues bien, dos años después de los respectivos cierres, el Concello por fin ha movido ficha. De hecho, están en trámite los concursos para la reapertura de los dos locales de hostelería, aunque con distintos tiempos. Está más avanzada la adjudicación de la cafetería de la estación, para la que incluso ya hay alguna oferta, pero pendiente todavía de la presentación de la documentación que se exige. En el caso del Auditorio de Galicia, los trámites para reabrir un local que fue puntero en la ciudad y que quedó en desuso cuando gobernaba el PP no hicieron más que empezar; de hecho, se está redactando el pliego de condiciones para su adjudicación, por lo que posiblemente reabra más tarde que la cafetería de la estación.

Se trata de la principal estación de autobuses de Galicia y del mayor espacio cultural y musical de la comunidad, y las dos instalaciones llevan dos años sin que sus usuarios puedan tomar un café. Su reapertura sería una buena noticia para la ciudad, pero la burocracia será la que fije día en el calendario.