De alcantarilla

Ignacio Carballo González
Ignacio Carballo LA SEMANA POR DELANTE

SANTIAGO CIUDAD

27 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

No me cansaré de insistir: nuestros políticos no están a la altura de lo que de ellos esperan los ciudadanos cuando no hacen más que tirarse los trastos a la cabeza y, en vez de concentrar sus esfuerzos en la búsqueda de soluciones a problemas centrales de la vida de todos y cada uno de nosotros, cuando en vez de dialogar constructivamente y procurar consensos, a lo que se dedican es a buscar culpables entre sus rivales, apuntar y disparar cañonazos dialécticos que en vez de despejar el panorama no hacen más que emponzoñarlo, enredando más si cabe esos mismos problemas. Viene esto a cuenta del sonrojante desastre ecológico que, como si importara un bledo, arrastra desde hace años Compostela y que no se va a resolver con la ampliación de la depuradora de Silvouta que ahora entra en funcionamiento. Pero podríamos hablar de otros asuntos de gran calado para la capital, como es la estación intermodal o, en el escenario de los hiperlocalismos que tanto alimentamos en Galicia, el de los aeropuertos. Desde la confrontación se podrá pensar que al pedir un pacto local sobre la depuradora de O Souto, Agustín Hernández tiene la aviesa intención de correr un tupido velo sobre su gestión o que es un oportunista. No lo creo. Lo cierto es que no hace falta ser un lince de la política para saber que es una obviedad la imperiosa necesidad de unión política, y empuje social tras ella, para sacudirnos esta vergüenza contaminante. Demasiada basura va río abajo para arrojarle más desde el Pazo de Raxoi. No es el momento de polemizar ni de echar balones fuera, ni en Santiago ni en Madrid, sino de dejarse de política de alcantarilla y consensuar soluciones.