Ratas de laboratorio en el punto de mira

Susana Luaña Louzao
susana luaña SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

álvaro ballesteros

Discuten en las Regueifas si es ético que la ciencia experimente con animales

22 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Tienen el atractivo de debatir sobre cuestiones que, aunque son científicas, preocupan a la mayoría de la población y forman parte del debate social porque suelen dar lugar a posturas encontradas. Quizás ese sea el éxito de las Regueifas que organiza la Universidade de Santiago, una iniciativa financiada por la Fecyt que hace unos meses enfrentó a partidarios y detractores de los transgénicos y luego hizo lo mismo con posturas a favor y en contra del cambio de huso horario. Ayer se celebró la tercera de las sesiones en el salón de actos de la Facultade de Ciencias da Información, esta vez para debatir sobre otro tema candente; el del uso de animales en la experimentación científica.

A un lado de la mesa se sentaron el filósofo Fernando Savater y Emma Martínez-Sánchez, de la Asociación Europea para a Investigación Animal, los dos partidarios del uso de animales en los laboratorios. Argumentan que no se puede hacer ciencia sin ellos, al menos mientras los ordenadores no sean capaces de reproducir la complejidad del organismo animal. Basan además su tesis en que estas prácticas tienen que superar numerosos controles y normativas para que no se utilicen más que cuando sea imprescindible.

Evitar el sufrimiento

Al otro lado, los detractores, el filósofo y profesor de la USC Óscar Horta, y Eze Paez, miembro del comité científico del Centro para la Ética Animal de la Universidad Pompeu Fabra. Ponen en duda, como buena parte de la sociedad, que por el bien del hombre se pueda inocular virus, someter a descargas eléctricas o privar de comida a los animales.

Como desde que empezaron las Regueifas, que copia el modelo de debate de Oxford aunque utilizando en su nombre una tradición muy gallega, el debate no se limitó a los discursos de los relatores, sino que a los participantes se les preguntaba al principio y al final su postura, para saber si habían cambiado de opinión, y en las redes sociales se abrió un debate previo a la retransmisión del mismo en streaming.