La investigación del Ciqus la promueven docentes de Química, Farmacia, y del área de Bioquímica y biología molecular. «Nuestro perfil es generar investigación interdisciplinar en la frontera del conocimiento, entre varias especialidades. En el centro surgen sinergias que nos permiten competir mejor y se genera un clima muy bueno para investigar al máximo nivel. El Ciqus incrementa la actividad científica, formativa y de captación de recursos de la USC», explica su director científico, José Luis Mascareñas.
Del Ciqus emergieron 3 empresas en el 2013 y el 2014: Oncostellae, del profesor Eddy Sotelo, que busca nuevos fármacos para el cáncer; otra dedicada a mejorar el diagnóstico del cáncer y enfermedades crónicas; y una de Rebeca García para simulaciones moleculares. Y grupos del centro colaboran con multinacionales, como Inditex, IBM o farmacéuticas; pero también con Algenex, AMSlab de Lugo, la alemana AiCuris, la viguesa Zadia Software, y otras.
Buscar aplicaciones
«Nosotros no somos proveedores de servicios a empresas. Nuestras relaciones con empresas son para investigación, y para buscar aplicaciones al conocimiento que generamos», sostiene Mascareñas. «Aquí no vamos a captar ningún grupo que no sea excepcional. Sería interesante que tuviésemos capacidad para atraer a más gente externa, o poder incrementar la relación con el CSIC», agrega.
Dolores Pérez resalta asimismo la dedicación del centro a la divulgación y comunicación científica: «Hemos llegado a más de 1.500 estudiantes de secundaria en 3 años; y promocionamos actividades como la presencia, el 17 de julio, de Richard S. Schrock, premio Nobel de Química en el 2005», sostiene.