La Catedral prefiere controlar accesos sin arcos de seguridad

santiago / la voz

SANTIAGO CIUDAD

La Catedral dispondrá de modernos sistemas de control en los accesos para mayor seguridad.
La Catedral dispondrá de modernos sistemas de control en los accesos para mayor seguridad. xoán a. soler< / span>

Este sistema, contemplado inicialmente, puede provocar grandes colas

10 abr 2015 . Actualizado a las 17:17 h.

La presencia de arcos en los accesos a la Catedral de Santiago constituyen una medida que está muy en el aire. Fue un anuncio realizado por el Cabildo a principios del mes pasado como forma de dotar de una mayor seguridad a la basílica compostelana. Pero esa iniciativa tiene más inconvenientes que ventajas, por lo que no existe ninguna garantía de que se vaya a aplicar.

Responsables eclesiásticos refieren que los arcos pueden resultar adecuados y eficaces en otros templos importantes, y de hecho los hay que tienen este sistema de control, pero en la basílica compostelana pueden resultar un tremendo incordio. Ello sucedería especialmente en las temporadas altas.

Según estas fuentes, los arcos podrían producir en las fechas de importante afluencia grandes colas en la basílica y un consecuente colapso en el acceso a la Catedral. En ese sentido, sería un método disuasorio. «Que tenga que pasar uno a uno puede resultar insufrible», señalan. Y en los casos en que haya detección de elementos no compatibles se detendría más la fila entrante.

No obstante, están en estudio las medidas más acordes con la basílica y, según fuentes de la seguridad de la Catedral, a partir de la semana que viene ya se podrá saber cuál es el sistema que mejor encaje con el control del acceso al templo. Y esa decisión partirá del análisis profundo de la seguridad en la Catedral en los meses de afluencia masiva, pero también de los sistemas implantados en distintos centros importantes del mundo y de las posibilidades económicas.

En ese sentido, sobre la mesa están métodos como el de los arcos, escáneres, rayos X y algún otro. «Hay muchas soluciones a implantar y las estamos barajando todas», indican representantes del servicio de seguridad del templo compostelano.

Recalcan las características de cada lugar a la hora de actuar: «Si vas a los museos vaticanos, en donde hay 25.000 personas diarias en algunos períodos y 9.000 otros días, ahí existen hasta cuatro sistemas de control de la gente». Refieren que la Catedral «no se pensó para poner arcos u otros sistemas» pero el estudio de la seguridad indicará la solución. Se tiene en cuenta también la planificación que se hace anualmente de la seguridad del templo y la verificación de los resultados y de su eficiencia.