«Los recortes en sanidad tienen un límite; creo que hemos llegado a él»

Fina Ulloa
Fina Ulloa OURENSE / LA VOZ

SANTIAGO CIUDAD

El neumólogo opina que las crisis «también ayudan a mejorar el sistema»

22 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Con el verano llegará la jubilación para el actual jefe de servicio de Neumología del CHUO, pero este salmantino de nacimiento asegura que seguirá viviendo en Ourense y disfrutando de sus gentes y sus paisajes, dos de los atractivos que más le seducen de una tierra a la que llegó en 1984 con una década de experiencia profesional. El hospital de tuberculosos de Piñor fue su primer destino y llegó a dirigirlo, tras la baja de su predecesor, José Luis López Sendón, hasta su cierre en los noventa.

-¿Cómo era entonces la infraestructura sanitaria?

-Por fuera era un edificio precioso, pero en cuanto a dotación estaba anclado en el pasado. Era cualquier cosa menos un hospital moderno, a pesar de que era el de referencia para aquí y para la zona de Vigo. La estancia media de los enfermos era de 189 días y había gente que llevaba años a la que costó mucho dar de alta porque estaban incluso abandonados de la familia.

-¿Cuál sería hoy su diagnóstico?

-Hoy Ourense es una provincia de nivel medio e incluso en algunas cosas mejor que otras muchas. Vamos en algunos aspectos por delante, sobre todo en formación, en el sistema de información y en el trabajo en equipo entre servicios o niveles. Por ejemplo en Neumología tenemos telemedicina y vamos ya por el sexto congreso para Atención Primaria, que es de los poquitos que se celebran en España. Claro que podríamos tener más cosas. Estamos acostumbrados a que nos pongan universidades y aeropuertos en todas las ciudades, pero sensatamente eso no se puede mantener. Hay que guardar un equilibrio: tener un nivel de calidad bueno y mejorarlo en lo posible, sin despilfarrar recursos públicos, que son de todos.

-¿Cree que su servicio está bien dotado?

-Somos los mismos que estábamos y el servicio está bien dotado a nivel de hospitalización. Hoy en día los servicios no deben tener mucha cama de agudo, si es posible. Nosotros tenemos 22 y creo que es suficiente.

-Este año estuvieron al 220 % de su capacidad habitual de camas en el pico de gripe. ¿Cómo se soporta esa presión asistencial?

-Este año, como todos, tuvimos un pico fuerte, pero a nosotros no nos extraña. Neumología está acostumbrada a que en el invierno hay varios momentos de agudización de pacientes crónicos, además con muchas patologías y mayor. La presión asistencial nosotros la asumimos perfectamente a lo largo del año y no nos crea mayor problema. Lo que ha llamado la atención este año es lo largo que ha sido.

-¿Hay alguna razón?

-Probablemente ha coincidido una serie de viriasis respiratorias y también puede ser que la vacuna este año parece que fue menos efectiva. Hemos visto más infección respiratoria en pacientes que, no hay que olvidar, están cada día más deteriorados.

-¿Ser jefe de un servicio en época de crisis es estar entre la espada y la pared?

-Es muy complicado. La crisis cambia muchas cosas y también ayuda a mejorar el sistema. Lo cierto es que la sanidad tenía un lastre, aspectos que se manejaban no eficientemente: malos canales de comunicación, cierto desinterés y la filosofía de tirar para adelante y, cuando había problemas, la administración estaba dispuesta a tapar agujeros. Pero cuando hay una crisis, todas las administraciones intentan ajustar gastos. ¿Eso significa recortes? Pues sí, desde luego con respecto al crecimiento que teníamos. Y creo que tanto el gobierno central como las autonomías deben conocer que los recortes en sanidad tienen un límite; creo que ya hemos llegado a él porque sanitariamente es difícil apretar más. ¿Se puede todavía hacer mejor gestión? Seguro. Las crisis generan cambios que modernizan el sistema sanitario, y de hecho se han hecho cambios que provocan que haya cosas que funcionan mucho mejor.

Pedro Marcos Velázquez jefe del servicio de neumología del CHUO

«Me preocupa el tabaquismo; cada vez se incorporan a edades más tempranas»

Para Pedro Marcos Ourense es una provincia que se ajusta a los parámetros normales en el ámbito de la neumología, aunque avanza que esta especialidad tendrá que afrontar en los próximos años un avance de las enfermedades respiratorias.

-¿Cuales son las patologías que más crecen?

-La enfermedad pulmonar obstructiva crónica, o EPOC, es emergente y sabemos que dentro de unos años será la tercera causa de mortalidad en el mundo.

-¿Es la que más preocupa?

-A mí me preocupa el tabaquismo, porque cada vez los jóvenes se incorporan a edades más tempranas y estamos en los 12 años. Y en ese terreno, preocupan las mujeres por dos motivos: ya hay más fumadoras que hombres y son más sensibles a desarrollar problemas. Tienen más EPOC y con mayor índice de mortalidad. Galicia está la segunda, después de Ceuta, en mortalidad en mujeres. Creo que hay que prestar más atención a ese problema del tabaco porque consume muchos recursos económicos y sanitarios a la larga. Y conste que sé lo difícil que es romper con ello, porque fumé muchos años. También hay una incidencia muy alta de cáncer de pulmón entre las mujeres.

-¿También por el tabaco?

-El tabaquismo influye, desde luego, pero también hay un número significativo de mujeres que no son fumadoras y lo desarrollan igualmente. Precisamente desde nuestro servicio de neumología del CHUO, el grupo dirigido por el doctor José Abal ha llevado una investigación junto con la Universidad de Santiago y parece que el gas radón, con alta presencia en Galicia, puede ser la causa que explique esa incidencia.