Aunque acumuló cinco puntos -cuatro en las tres primeras jornadas de la segunda vuelta-, el Noia cerró el mes de enero con una mínima derrota en el feudo del Sarriana (0-1). Un gol en propia meta de Néstor, cuando intentaba despejar el balón (min 32), propició el inesperado e inmerecido revés del elenco de Javi Touriño.
Según el preparador del equipo noiés, el partido estuvo condicionado por «las numerosas bajas que teníamos en primer lugar y por el pésimo estado del campo en segundo, esta circunstancia fue la que provocó el gol de ellos, pues el balón hizo un bote extraño cuando Néstor lo iba a alejar de nuestro área», explicó.
En cualquier caso, el de Santiago indicó que si alguien mereció ganar fue su equipo: «Admito que el encuentro fue muy malo. Pero el poco fútbol que hubo lo pusimos nosotros, que dispusimos de oportunidades por medio de Iago, Joselu y Brión».
En las dos próximas jornada, el colectivo de Noia jugará dos encuentros seguidos en San Lázaro: ante el Vilalbés y Ferreira. «Nuestro objetivo es acercarnos a los 42 o 43 puntos en febrero para atar la permanencia», resaltó.