El recorte se produjo en agosto y afectó a varias líneas de transporte de la Costa da Morte
06 oct 2015 . Actualizado a las 11:40 h.La supresión de servicios practicada desde el pasado mes de agosto por la empresa Autos Vázquez en varias líneas que cruzan la Costa da Morte llevó ayer a los alcaldes de Mazaricos, Juan Jose Blanco; Santa Comba, José Antonio Ucha; y Coristanco, Amancio Lavandeiro, a reunirse con la delegada territorial de la Xunta, Belén do Campo, a quien trasladaron el malestar vecinal y la preocupación municipal.
Autos Vázquez ha suprimido dos frecuencias de la línea A Coruña-Muros, una por la mañana hacia la capital herculina y otra de vuelta por la tarde, lo que afecta a los tres municipios, mientras que Coristanco sufre a mayores la supresión de una frecencia al mediodía hacia Ponteceso que afecta a la zona de Cereo, Valenzuela, San Paio o Castro.
Belén do Campo les comunicó que en la Dirección Xeral de Mobilidade no consta ninguna autorización a la concesionaria para acometer dicha supresión, por lo que se efectuará una inspección, al tiempo que convocará a la directora xeral a una reunión con la empresa, de cuyo resultado dará traslado a los tres alcaldes, según informó Amancio Lavandeiro.
La delegada informó a los alcaldes de que la concesión conlleva la obligación de mantener las frecuencias asignadas y que no se puede suprimir servicios de forma unilateral. Los regidores le indicaron que la propia web de la empresa informa de los cambios. Los tres mandatarios hablan de un problema «global», de ahí que en Santa Comba y Coristanco se presentasen cientos de firmas en los últimos días reclamando el mantenimiento de los servicios.
«Entendemos que as sancións non son a solución ao problema, por iso agardamos que haxa unha maior presión dende a Xunta sobre a concesionaria», dijo José Antonio Ucha Velo.