Cabrejo, sin fecha de caducidad

Ignacio Javier Calvo Ríos
NASO CALVO SANTIAGO / LA VOZ

ORDES

XOÁN A. SOLER

Con 40 años recién cumplidos, el lateral de Camariñas acaba de renovar una temporada más con el Ordes de Tercera «con máis moral que un xuvenil»

29 jul 2015 . Actualizado a las 12:39 h.

Tiene «máis moral que un xuvenil» y acaba de cumplir 40 años. Tiene el depósito lleno y no piensa en la retirada. Acaba de renovar un año más con el Ordes de Tercera División, club en el que cumplirá su cuarto curso. Juan Cabrejo (Camariñas, 26/05/1975) no tiene fecha de caducidad.

Empezó a jugar en los juveniles del Camariñas con 14 años y pronto pasó para el primer equipo. Antonio Murcia se fijó en él y le llamó para el filial del Compostela. Luego jugó tres campañas de blanquiazul en el conjunto profesional. Se fue al Eibar (dos años) y al Elche (otras dos campañas), regresó a Ipurúa durante un curso y defendió a lo largo de cuatro temporadas la camiseta del Cartagena. En su vuelta a Galicia, tres años en el Cerceda y cuatro en el Ordes.

«Non quero facer o ridículo. O teño moi claro dende hai anos. Atópome moi ben fisicamente e por iso sigo. O día que non sexa así, direi adeus ao fútbol», señala con contundencia el lateral zurdo. También entiende que su situación no es tan especial, pues hay otros futbolistas que se retiran con edades avanzadas, aunque sí deduce que en su caso las razones fundamentales podrían ser las ganas y la enorme ilusión que tiene por practicar este deporte. Además, porque «a xente nova igual non apreta coma o faciamos nós cando eramos máis novos».

Sabe que «corenta anos son moitos», pero cada año que pasa su rendimiento sigue al mismo nivel, «xogando unha media de 35 partidos por ano». Dice que lo da todo en el campo y promete que seguirá «mentres o corpo aguante». Este verano tuvo alguna oferta para cambiar de aires, pero finalmente eligió el Ordes, en donde mostraron mucho interés por su renovación: «O trato é sensacional e imos manter a base do ano pasado», recuerda el defensa de Camariñas.

Los objetivos

Sobre los objetivos del Ordes en este nuevo proyecto, destaca que «dadas as circunstancias do clube, a nosa meta vai ser a permanencia. Pelexaremos por non descender. Temos unha plantiña curta, con xente moi nova, onde os veteranos teremos que facer que todos tiren do carro ao mesmo tempo».

En la recta final de su larga carrera deportiva, Juan Cabrejo subraya que tiene grandes recuerdos y que el balance es muy positivo. «Teño máis lembranzas boas que malas», apunta con una sonrisa. Y llevado por la emoción, hace un pequeño repaso: «Lembro cando deixei Camariñas da man de Antonio Murcia, quen me deu a oportunidade de xogar en Segunda División B co filial do Compos. Tamén as tempadas no Eibar, onde coincidín con grandes xogadores como David Silva. Vexo con grande ledicia aqueles bos tempos do Compos, con Nacho, Lekunberri, Pablo Coira e Lubo Penev. O ascenso do Cartaxena. Lembro os dous anos do Elxe, pois tiñamos moi boa plantiña, aínda que non fomos quen de ascender».

Buenos recuerdos

Cabrejo nunca se olvidará de toda la gente que estuvo a su lado, en los buenos y en los malos momentos. La lista es muy larga y siempre la encabeza Murcia, que le permitió jugar en un «auténtico equipazo». Luego, Paco Jémez en su etapa en el Cartagena; Suso Moure, que le dio toda la confianza del mundo cuando casi era un principiante; y Luis Santiago, en su paso por el Cerceda. De todo corazón dice que agradece el cariño de la gente de Camariñas y de los amigos de una localidad que le trata como un héroe. Y no se olvida de dos personas que trabajan en el Ayuntamiento de Cerceda y que le ayudaron mucho.

De su larga trayectoria no borraría nada, pues de las malas experiencias también se aprende. Llevó un gran disgusto cuando el Compos empezó a cavar su tumba, aunque él ya estaba en Eibar, o cuando el Elche, con un gran equipo, se quedó sin ascenso. Y no pudo aguantar las lágrimas cuando en el último partido el Eibar podía ascender a Primera y se quedó en el camino. Y más lágrimas cuando en su primer año en Cartagena se quedó sin subir a Segunda al perder el partido decisivo en el minuto 90 y de penalti, uno de los mayores castigos en este deporte.

Detalles que marcan

Entre los detalles que más le marcaron a lo largo de todos estos años, Cabrejo recuerda el debú a nivel profesional en el Compostela: «Foi o primeiro gran momento e pode que por iso sexa o máis importante», revela. También está el ascenso con el Cartagena, que «foi impresionante».

Mención especial para su paso por Eibar, en donde coincidió con «grandes futbolistas». Habla del cancerbero Gorka Iraizoz, de Manuel Castiñeiras y de David Silva, que «era un xogador diferente». Del internacional, Cabrejo recuerda: «Xa daquela era un espectáculo, era moi superior a todos. Era un neno, que viña cedido polo Valencia. Karmona, un central que estivo no Alavés, veu como Silva lle rompeu a cintura nun adestramento. O defensa parou o exercicio e dixo: rapaz, vou poder presumir de que xoguei contigo. Así era David Silva».