El área de Compostela apenas registró 435 pisos turísticos en un año, el 72 % en la capital

Patricia Calveiro Iglesias
P. Calveiro SANTIAGO / LA VOZ

O PINO

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En Santiago se estima que hay unas 4.000 plazas disponibles, pero en el directorio de la Xunta figuran menos de 1.430

26 may 2018 . Actualizado a las 22:18 h.

Este mes se cumplió el primer año desde la entrada en vigor del decreto que regula las viviendas de uso turístico en Galicia, el cual exigía que todos los inmuebles que se alquilasen por un período inferior a 30 días y un mínimo de dos veces se dieran de alta en el Registro de Empresas y Actividades Turísticas (REAT) de la Xunta. Y, en este tiempo, solo se inscribieron en Santiago y su área de referencia 435 negocios, lo que no llega a suponer ni dos al día de media. Ni siquiera el anuncio de que comenzarían las inspecciones -en marzo- logró disparar la cifra para ajustarla a la realidad, pues solo en Santiago se estima que hay unas 4.000 camas disponibles y apenas figuran en el directorio oficial 1.428. Es decir, falta el 64 %.

La capital gallega, como era de esperar, alberga el mayor número de viviendas de uso turístico, que suman algo más de 800 habitaciones. Pero los concellos del entorno de Compostela, aunque parecían no tener mucha presencia, concentran prácticamente un tercio de las plazas que hay en la zona. Son más de un centenar de negocios y unas 380 habitaciones, según el directorio oficial que maneja la Xunta, lo que no quita que, como en el caso de Santiago, pueda haber muchas más que operen de forma irregular sin estar registradas en el REAT.

Influjo del Camino

Tras Compostela, Ames destaca por el número de pisos vacacionales, beneficiándose de alguna forma de la proximidad a la meca jacobea. Pero también destacan dos municipios directamente vinculados con el paso del Camino, como Arzúa y O Pino. Tanto es así, que esta opción de negocio es una fuente de ingresos para un 0,3 % de sus vecinos (la misma proporción que entre los santiagueses). Frente a estos, otros municipios del interior más habitados como Teo, Padrón, Ordes y Santa Comba no llegan a la decena de pisos turísticos. Sin embargo comprobamos como en el caso ordense, solo en la plataforma Airbnb, se anuncian media docena de viviendas a pesar de haber una sola registrada.