«Somos iguais, con ou sen cadeira de rodas»

emma araújo SANTIAGO / LA VOZ

BOQUEIXÓN

Xoán A. Soler

Tres deportistas con escasa movilidad conciencian en O Forte sobre la igualdad y el afán de superación

16 may 2017 . Actualizado a las 23:29 h.

El colegio de O Forte, en Boqueixón, cerró ayer el programa de deportes con el que la docente María Paz Gago ha enseñado a sus alumnos de ESO que el ejercicio físico inculca más valores de los que nunca pudieron imaginar. La mejor forma de comprobarlo fue competir con deportistas cuya única diferencia con ellos era que necesitaban sillas de ruedas para moverse.

«Cuando entran los deportistas, los alumnos los ven con pena, pero cuando termina la actividad lo que sienten es admiración por todo lo que hacen y el valor que tienen», explica Raquel Sanduende de la Fuente, responsable de proyectos de ENKI, fundación que apuesta por la inclusión de personas con discapacidad a través del deporte. Sanduende y Paz supervisaron toda la actividad, favoreciendo que todos los alumnos probasen las diferentes sillas de ruedas para ponerse en la piel del otro. Concluida la tanda de juegos y carreras, el testimonio de varios de ellos evidenció el éxito de la iniciativa.

Víctor Gómez reconoció que «para xogar ao tenis con esa cadeira tes que facer moita máis forza». «Agora xa non os vexo diferentes, son iguais, pero penso que eu non estaría tan feliz como os vexo a eles», añadió.

Manuel Jorge Lapido comparte su valoración: «Tiven unha sensación de impotencia ao pedalear e xirar coa bici. Fai falta moita forza de vontade e moito valor para chegar onde están estes homes».

«Todos somos iguais, con ou sen cadeira de rodas. Cando estás con eles, aínda coa discapacidade, dáste conta de que non hai diferenzas, pero ten que custar moitísimo estar nunha situación distinta á do resto de persoas que seguro que non che entenden», añade Marina Vidal Míguez. Andrés Gago, otro alumno, quedó impactado con la historia y el trabajo de uno de los deportistas, Iván Manuel Montero Ferreiro, a quien un camión atropelló cuando iba en bici. Hoy se mueve en silla de ruedas y en la bici especial que maneja solo con las manos. «Estas actividades son un aliciente para nosotros», destaca Montero. Al mensaje de la igualdad añade el de la concienciación vial. «En seguridad se avanzó bastante, pero solo con que un 1 % no respete a los ciclistas ya hay muertes».