Piden 15 años de internamiento psiquiátrico para el joven que apuñaló a su novia en Boqueixón
BOQUEIXÓN
El agresor padece un trastorno esquizofreniforme, según los informes médicos en los que se basa la Fiscalía
06 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El joven que sufrió un brote psicótico y apuñaló repetidamente a su novia, vecina de Santiago, en la casa en la que ambos convivían los fines de semana en Boqueixón será juzgado la próxima semana en la sección primera de la Audiencia Provincial. La Fiscalía, conforme al informe forense del Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), ha concluido que, en el momento en el que sucedieron los hechos, el acusado, Iván N. F., que tenía 24 años de edad y padece un trastorno esquizofreniforme, «tenía sus facultades intelectivas y volitivas anuladas, ya que presentaba clínica psicótica (...) con alteraciones tanto del contenido del pensamiento como sensoperceptivas con alteración patológica de la percepción de la realidad y distorsión cognitiva grave».
Por ello, el ministerio público pide para Iván N. F. la pena de quince años y un día, pero no de prisión, sino de internamiento en un centro psiquiátrico en el que pueda recibir tratamiento de su dolencia mental. Además, deberá indemnizar a su exnovia con 66.900 euros. El delito del que se le acusa es de homicidio en grado de tentativa, ya que la joven, pese a la gravedad de las heridas que sufrió, logró sobrevivir.
La agresión se produjo a medianoche del 20 de junio del 2015. La víctima, que tenía en aquel momento 22 años, estaba adormilada en la cama de la habitación que compartía con su novio en una casa situada en Boqueixón cuando el acusado le agarró por el cuello con fuerza y colocó sus manos sobre la nariz y la boca. Como no pudo asfixiarla porque la chica se resistió, le clavó en varias ocasiones unas tijeras metálicas en el cuello y la garganta. Después la agarró por los pelos y la arrastró hasta la cocina donde volvió a clavarle unas tijeras en el cuello, la nuca y el pecho.
El agresor, que fue detenido y cumple prisión preventiva, pensó que su novia estaba muerta, por lo que se marchó de la estancia, a la que regresó después y, ante las súplicas de la joven, él le quitó las tijeras. La chica sufrió heridas gravísimas con importantes secuelas físicas y psicológicas.