Casi un año después de haber completado el Camino de Santiago desde Lugo, Juan Antonio Corbalán tuvo la ocasión de asistir al estreno del documental de aquella experiencia. Minutos antes proclamaba su satisfacción por todas las vivencias: «Era algo que está en el inconsciente de muchos de nosotros, pero nunca me había planteado hacerlo. Cuando me llamaron del Obradoiro y vi lo que había detrás de la iniciativa, no tuve duda. Me alegro muchísimo. Fue una semana dura. Exige esfuerzo, pero merece mucho la pena por la convivencia, porque notas que eres parte de algo que está cargado de una energía muy positiva».
No solo se encariñó con la Ruta Xacobea sino que se ha convertido en un seguidor más del Obra. Y el sábado tuvo oportunidad de presenciar la victoria ante el Andorra. «Fue terrible -comentó-. Casi preferiría ganar de más. Ya fue una alegría poder eludir el descenso el año pasado. En este, queda mucho por hacer. Sé que ha pasado muchas dificultades por las lesiones».
Más juego exterior
A tenor de lo que ha podido ver, apunta por dónde puede llegar la mejoría: «Necesita imperiosamente enriquecer su tiro exterior. Es un club al que le tengo mucha simpatía. Conozco lo que representa. Los que vemos el baloncesto desde un punto de vista técnico... Te das cuenta de que el equipo necesita un poquito más de juego por fuera».
La manera de celebrar la victoria ante el Andorra le recordó a algún título de su etapa de jugador: «Lo viví junto al presidente y creo que para él fue casi más que una de las copas de Europa que ganamos en mi etapa. Cuando tienes un equipo modesto cada triunfo es una final, cada victoria es sobrevivir. Por lo tanto, entiendo la alegría».