Dani Chino es la única baja para el partido del sábado en Peñíscola
06 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En la primera comparecencia de prensa del 2017, pocas horas antes de coger el autobús rumbo a Peñíscola, Santi Valladares se soltó la melena que no tiene, sin boutades, con ánimo de defender a los suyos: «Lo que están haciendo estos chicos es indescriptible».
En las últimas jornadas, cada equipo que se ha enfrentado al Santiago Futsal encaró esa contienda con intención de certificar o dejar encarrilada la presencia en la Copa de España. Sucedió que el Magna Navarra perdió en Sar en el último segundo, contra portero jugador. Y que el Jaén vio como concedía un empate en el último minuto, después de tener tres goles de renta. En los comentarios posteriores a esos dos partidos, el técnico percibe que hay más deméritos del rival que méritos de su equipo. Y se rebela: «Hacemos muchas cosas mal, porque si no estaríamos mejor. Pero también hacemos cosas bien». En el caso de la remontada del 0-3 ensalzó «la fe, el sacrificio y la confianza de unos en otros» mostrada por todos los jugadores. «Contra nosotros parece que todo el mundo certifica -añadió-. Oyes tantas cosas... Somos el Santiago Futsal».
Los Reyes en autobús
Sea como fuere, el equipo encara la penúltima jornada de la primera vuelta después de pasar la noche de Reyes en autobús. Estará de vuelta el domingo a primera hora de la mañana, tras otros mil kilómetros de asfalto nocturno. El martes hay otra vez Liga, en horario unificado, para llegar al ecuador de la competición. El Santiago recibirá al Cartagena. Y el viernes abrirá la segunda vuelta, otra vez en el Multiusos de Sar, frente al Jumilla. En opinión de Valladares, «no tiene ni pies ni cabeza» tanta apretura, cuando el año consta de 365 días.
En el caso del conjunto compostelano, le toca pasar la noche de Reyes lejos de las familias. Y después disputará dos duelos que pueden ser determinantes en la lucha por la permanencia, ante dos rivales que están por detrás en la clasificación.
El técnico reconoce que es partidario de pensar solo partido a partido, pero que en este tramo va un poco más allá. Y la primera cita llega mañana, a las 18 horas, en Peñíscola. Subraya que es un equipo en un gran momento de forma, capaz de defender con mucha agresividad.
Allí militan tres caras conocidas: el portero Iker, el ala Iván Rumbo y el cierre argentino Lucas Bolo. A Valladares no le pasa inadvertido que los exjugadores del Santiago Futsal suelen lucirse cada vez que se cruzan. Y se alegra de que les vayan bien las cosas, pero le gustaría que esta vez «Iker cante e Iván esté más lento». De Lucas Bolo, que hace poco más de un año decidió que no quería seguir en Sar y ya no acudió al trabajo de pretemporada, sin previo aviso anterior, comentó: «De él hace tiempo que no sé nada».
Víctor espera un partido muy recio: «El Peñíscola es un equipo fuerte, con una plantilla amplia y guerrera, de los más competitivos».
La única baja santiaguesa será la del pívot Dani Chino, que probablemente reaparecerá el martes ante el Cartagena.