A diferencia de anteriores comicios en los que hubo pequeñas incidencias, la jornada electoral transcurrió ayer con normalidad en Santiago. No trascendieron incidencias reseñables durante el día a excepción de una en Melide, donde tuvo que intervenir la alcaldesa Dalia García (PP).
Una mujer que acudió por la tarde al edificio multiusos de Melide tuvo dificultades para depositar su voto debido a un error en el censo electoral. Los datos registrados contenían una errata y el presidente de la mesa no admitió la papeleta hasta recibir la confirmación con las credenciales corregidas. Se vivieron momentos de tensión entre la mujer y los miembros de la mesa ante la negativa, ya que la melidense aseguraba que llevaba votando veinte años en el mismo colegio electoral sin que se hubiesen percatado del error.
La mujer, junto a su hija, se presentaron en el Concello para tratar de aclarar la situación antes del cierre de las urnas. Desde el consistorio de Melide corroboraron la identidad de la vecina de la villa y pidieron al presidente de la mesa electoral que telefonease al censo para recibir la confirmación. Este se negó a hacerlo y exigió que se notificase la rectificación de forma escrita. Hasta el edificio multiusos se llegó a desplazar la alcaldesa de la localidad, Dalia García, con la intención de mediar entre las partes.
La mujer finalmente pudo ejercer su derecho al voto ya que se envió un fax con un nuevo certificado personalizado que confirmaba que existía un fallo de transcripción en el número de identidad. El censo llevaba mal desde el año 1996 y hasta la actualidad esta melidense pudo votar con normalidad en cada una de las elecciones celebradas, sin que los responsables de la mesa se percatasen del error en su número de DNI.
En el resto de concellos de la zona la jornada transcurrió con absoluta normalidad, sin tener que intervenir la policía en ningún colegio electoral.