«El impacto sí es mayor del previsto, pero este mes es el mejor para la obra del ILS»

serafín lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

El director del aeropuerto pide disculpas por los desvíos y augura que Lavacolla rondará este año el tráfico anterior a la crisis

26 jun 2016 . Actualizado a las 08:28 h.

Cuentan sus colaboradores que el director del aeropuerto de Santiago llegó hace unos días contrariado a la oficina. Había encontrado un chicle en el suelo de la terminal de salidas. Ricardo López Navarro se aplica en cultivar la fama de meticuloso que lo acompaña. Para quien sostiene un discurso tan volcado en la atención al usuario, este mes debe estar resultando duro. Nada comparable, en cualquier caso, a la penitencia de los afectados por los 22 vuelos desviados desde que, el pasado día 7, Aena desconectó el sistema ILS III para adecuarlo a la normativa de la UE, una reforma que rematará el 3 de julio. López Navarro defiende el mes elegido para las obras, aunque asume que su impacto está resultando mayor del previsto.

-Las modificaciones en el ILS eran necesarias, pero su repercusión es mayor de la esperada.

-Sí. Un poco mayor. En Galicia la meteorología es impredecible.

-Pero eso ya lo sabían. ¿Sigue pensando, pese al cúmulo de incidencias, que el mes elegido para desactivar el ILS era el idóneo?

-Estoy convencido. Si lo hubiéramos hecho en un mes invernal, la afección hubiera sido mucho mayor, incluso podríamos haber pasado algún día sin poder operar ningún vuelo. Y en este caso las incidencias por niebla han durado una o dos horas. Sí hemos tenido la mala suerte de que han coincidido con picos del tráfico del día. Pero han sido puntuales.

-¿Hay un plan B en el caso de que esto vaya a más o solo queda acelerar los trabajos al máximo?

-No tenemos por qué temer que esto se complique demasiado, pero vamos a acabar los trabajos en plazo. Esperamos que el 3 de julio ya tengamos el ILS y podamos operar con total normalidad.

-¿Ese plazo del día 3 incluye las pruebas del avión de laboratorio para el calibrado del sistema?

-Sí. El ILS funcionará el día 3.

-El malestar de los viajeros afectados es lógico, pero también llegará a las aerolíneas. ¿Están recibiendo muchas presiones?

-Las compañías saben que es una actuación necesaria para adecuarnos al nuevo reglamento europeo y no están haciendo presión. Entiendo que para los pasajeros es una incomodidad muy grande, porque están acostumbrados a que el aeropuerto de Santiago tenga muy pocas incidencias meteorológicas. Pido disculpas a todos por las molestias que se hayan podido causar.

-Tras el bienio negro 2012-2013 y la ligera recuperación del tráfico en el 2014, el aeropuerto está afianzando este año el fuerte crecimiento del 2015. ¿Se mantendrá en el segundo semestre?

-Llevamos un año muy bueno. En el 2015 empezamos a crecer por encima de los dos dígitos. Y este año estamos mejorando esos datos hasta la fecha, con un crecimiento acumulado del 17 %. Las expectativas para lo que resta del año son buenas. Es probable que no podamos mantener ese ritmo, pero espero que sea un buen año para el aeropuerto.

-¿Hay margen para crecer más?

-Crecer al 17 % es una barbaridad. Este año estaremos cerca de los valores anteriores a la crisis.

-¿Y qué necesita Lavacolla para superar las cifras de entonces?

-A nivel de infraestructura, nada. Estamos preparados. De hecho, estamos haciendo actuaciones dentro del aeropuerto para poder atender esa demanda sin problema. Y el crecimiento sostenido depende de muchos factores, muchos externos, como la buena marcha de la economía española y de los países con los que tenemos conexiones.

«Los desvíos son una incomodidad grande para los pasajeros. Lo entiendo y quiero pedirles disculpas»

«Aena está abierta a cualquier proyecto para la vieja terminal que sea viable. Por ahora, no hay nada»