Estos componentes no pueden ser depurados por estaciones como la de Silvouta

La Voz

SANTIAGO

21 feb 2016 . Actualizado a las 04:00 h.

A los problemas que arrastra desde hace tiempo la depuradora de Silvouta se suma su incapacidad para limpiar este tipo de sustancias. Ya no es solo que se haya quedado obsoleta para tratar la cantidad de aguas residuales que llegan de Santiago, es que además estos restos contaminantes no suelen ser detectados por las estaciones, y así siguen en el agua pese a que muchos son peligrosos para la salud humana y algunos incluso están prohibidos.

Por eso, aunque la presencia de estas sustancias se repite en cualquier punto en el que se llevan a cabo los análisis, las concentraciones son mayores una vez rebasado el lugar de la estación depuradora.

Tampoco el estado del río Sarela es idóneo, pero Fernando Cobo asegura que la contaminación que soporta es muy inferior a la del Sar.

El Plan Hidrolóxico de la Xunta tiene previsto invertir 446 millones de euros en la depuración de las aguas gallegas, tanto fluviales como marítimas, entre este año y el 2021.