El entrenador del Obradoiro destaca el gran acierto en los triples del conjunto canario
18 ene 2016 . Actualizado a las 14:02 h.Moncho Fernández caminó con paso lento hacia la sala de prensa del Multiusos de Sar, con cara de pocos amigos y con la idea de que al Obradoiro se le escapó una victoria que en el primer cuarto parecía estar muy cerca. El mal arranque del segundo cuarto, en el que el Tenerife tuvo un acierto increíble en los lanzamientos triples (convirtió 7 de 10 intentos), las numerosas pérdidas «a veces tontas» y la superioridad de los canarios en el rebote ofensivo fueron claves que alejaron a los santiagueses del triunfo.
«Son muchas jugadas las que me vienen a la cabeza, muchas pequeñas acciones, pero en general puedo decir que hicimos tres cuartos muy buenos. El gran lunar fue el segundo, en el que se nos fue la ventaja inicial con muchas pérdidas y un gran acierto de tres del rival», resume Moncho Fernández. Para el entrenador santiagués, el Obra realizó «un gran trabajo defensivo» en la segunda parte, aunque destaca que los rebotes en ataque le hicieron mucho daño al cinco gallego. «Cuando parecía que teníamos el partido perdido, volvimos y lo disputamos hasta el final», apunta el técnico.
Se queda con el esfuerzo de su equipo, que en la segunda parte solo permitió nueve canastas del Tenerife, «y dos de ellas en el límite, una incluso fuera de tiempo». Insiste en que el partido se decidió por pequeños detalles y «al final salió cruz».
Los tiros libres
En la recta final, el encuentro se decidió desde los tiros libres, en donde Caloiaro y Triguero erraron dos lanzamientos, algo a lo que Moncho Fernández quiere restar importancia. «También ellos fallaron, pero esos tiros libres no tendrían importancia si antes no hubiésemos fallado otras cosas. En el último cuarto hubo más acciones, como dos bandejas, un triple... Lo cierto es que hicimos un gran esfuerzo para volver al partido y con algo de suerte hubiésemos ido a la prórroga», comenta el de Pontepedriña.
Recuerda que las «pérdidas tontas» coincidieron con los tripes espectaculares que convirtieron los canarios y contra este acierto «nada puedes hacer», subraya el entrenador obradoirista. También indica «dos o tres acciones que no estuvieron bien jugadas», que se produjeron porque el equipo estaba «un poco acelerado, tal vez, por el ansia de volver pronto al partido».
A Moncho Fernández no le sorprendió el juego del conjunto canario, que le hizo «mucho daño» a un Obradoiro que no llegó a tiempo para forzar la prórroga.