El Obradoiro pesca con nasas

Manuel García Reigosa
M. G. Reigosa SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

Andy Toolson abrió el camino hacia el fichaje de Haws, la cesión de Pustovyi permitió sortear un traspaso y la lesión de Brown no frenó el interés

03 ago 2015 . Actualizado a las 17:29 h.

Tanto los equipos pudientes como los de presupuesto modesto saben qué quieren fichar. La diferencia está en el margen de maniobra. Mientras los primeros acuden a la lonja y pueden hacerse con piezas pescadas y testadas, los segundos tienen que salir a faenar para intentar optimizar sus inversiones, siempre más arriesgadas. Y el Obradoiro se ha especializado en echar las nasas y llevar a los jugadores a su redil antes de que lleguen a puerto. Para muestra, tres de los fichajes de esta temporada. Todos tienen detrás más de un año de paciente trabajo hasta cerrar el acuerdo.

El club oficializó ayer la incorporación de Tyler Haws, un escolta formado en la Universidad de Brigham Young que sobresale por su facilidad para ver aro desde la media y la larga distancia. En su última temporada universitaria promedió 22 puntos.

El Obradoiro ya le había tomado la matrícula en su tercer año en Brigham Young. Y, como quiera que en la etapa académica los estudiantes no pueden tener agentes, el club apeló a la mediación de Andy Toolson (primo de Ryan Toolson y exjugador de Zaragoza, Andorra, Joventut, Girona y Estudiantes, y de la misma Universidad que Tyler) para poder contactar con la familia de Haws.

José Luis Mateo, que lo conoce de cuando militó en la ACB, le pidió además que le comentase al padre (igualmente exjugador profesional) cómo es la Liga Endesa. Más adelante también recurrió a Fred Roberts, un americano de Utah que jugó en el Barcelona en los años 90, para seguir tendiendo puentes.

Buen destino para tiradores

Así fraguó la primera toma de contacto. Después, el cuadro técnico santiagués le hizo llegar un vídeo con muchas de las jugadas preparadas para Corbacho y Waczynski. Los Haws no necesitaron mucho más para saber que en Sar no todo gira alrededor del pick and roll. Y cuando al joven Tyler le llegó el momento de buscar un agente, el padre le comentó al intermediario que ya había un equipo español con trabajo adelantado, el mismo del que habían salido catapultados hacia la NBA Mike Muscala y Robbie Hummel. Una conversación personal del propio Tyler Haws con Moncho Fernández acabó de cerrar el círculo.

El Obradoiro consiguió asegurarse una opción preferencial para el caso de que el escolta, que disputó la Liga de Verano de Las Vegas con los Cavalliers de Cleveland, no encontrase un hueco en la NBA en ese primer intento. Y así es como ha recalado en Sar.

Con Artem Pustovyi el interés del Obradoiro viene incluso de más lejos. Pero hasta el pasado mes de junio los intentos por firmar al pívot ucraniano habían sido infructuosos, en gran medida porque su club, el Khimik, no quería desprenderse de él.

La pasada campaña, sin embargo, las posturas empezaron a acercarse. El conflicto bélico en el que está sumida la antigua república soviética ha hecho que la liga bajase muchos enteros.

El Khimik ya no se mostraba inflexible. Pero quería un traspaso y el Obradoiro no tenía dinero para hacer viable la operación. La solución llegó por la vía de la cesión, porque las tres partes estuvieron de acuerdo en alcanzar el entendimiento.

Al jugador le quedaban tres años de contrato y aceptó ampliar a cuatro. Los tres próximos los disputará en Sar y, en caso de que le llegase alguna oferta de su agrado, sería necesario el beneplácito del Obradoiro y del Khimik para que pudiese explorar un nuevo destino.

Percance y demora

Alec Brown era el elegido para formar la pareja de cuatros con Maxi Kleber el pasado curso. Una lesión en el hombro, que le obligó a pasar por el quirófano y a estar seis meses alejado de las canchas, impidió que aquel primer intento llegase a buen puerto.

No fue un percance menor. Pero el Obradoiro no perdió el interés en el pívot. Antes al contrario, a través de la Policlínica La Rosaleda, una de las empresas presentes en el consejo de administración, pudo hacer un seguimiento puntual de la intervención quirúrgica y de la recuperación del jugador, para quien no pasó inadvertido que el club lo siguiese teniendo en el punto de mira en un momento complicado.

A la espera de que Chagoyen dé el sí a la propuesta de renovación, solo faltaría la contratación de un base. Pero ahí el Obradoiro intentará ir a la lonja, confiando en las ofertas que pueda haber a última hora para evitar que haya stock.