El Obradoiro despide un curso dulce

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

LOF

Opondrá su baloncesto cerebral a un Baskonia más directo que aún aspira a la sexta plaza

24 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Obradoiro despide la temporada esta tarde (18 horas, Multiusos de Sar) ante un Baskonia que ya tiene billete para el play off pero que en esta última jornada se juega acabar sexto, séptimo u octavo. No es un duelo trascendente, pero los locales ya han demostrado sobradamente que no se han dejado ir en la recta final de curso, y quieren terminar con buen sabor de boca una temporada dulce. Los visitantes intentarán evitar por todos los medios en el primer cruce de las eliminatorias por el título de Liga al Real Madrid y al Barcelona.

En las horas previas al encuentro, los dos técnicos han dibujado con nitidez el perfil del adversario. Moncho Fernández prevé un oponente de clara vocación ofensiva: «Es un equipo de llegadas rápidas en transiciones, con un perímetro demoledor y muy vertical, empezando por los bases y acabando por últimos en llegar, Hopson y Hanga. Eso es lo primero que tenemos que controlar, ya que en la ida la gran diferencia se marcó en esas transiciones. Lo principal es que no corran y llevar el partido a media pista. Para eso hay que evitar las pérdidas de balones, tener acierto ofensivo y controlar el rebote.  Nos espera un equipo muy físico».

Y así hablaba Ibon Navarro del Obradoiro antes de viajar hacia Compostela: «Es un equipo muy diferente al resto de los de la ACB. Te gusta verlo, no abusa del bloqueo directo, se pasan muy bien el balón. Despliega un juego diferente en ataque y eso requiere que mantengamos un nivel de concentración muy alto porque es un conjunto con posesiones muy largas que te obliga a tener varios esfuerzos defensivos seguidos. En defensa maneja diferentes ritmos en cuanto a agresividad. Tácticamente es un equipo muy rico. Es necesaria mucha concentración y mucha paciencia tanto en ataque como en defensa para poder jugar contra ellos».

Así pues, se espera un duelo de modelos contrapuestos, de dos velocidades: más pausado y de más elaboración el del Obradoiro, más veloz y más directo el del Baskonia.

Los dos técnicos tienen a todo el plantel disponible, si bien en el caso de los santiagueses Keaton Nankivil ha arrastrado molestias durante la semana y Rafa Luz sufrió un pequeño percance en una mano que, en principio, no le impedirá jugar.

Cualquiera que sea el resultado de esta tarde, el Obradoiro pondrá el punto y final a un curso dulce, sin apenas sobresaltos, en el que siempre se movió en la zona templada de la clasificación, más cerca del corte del play off que de la zona de riesgo.

Como decía Moncho Fernández esta misma semana en una entrevista en La Voz de Galicia, también será día de despedidas para una familia que, como cada año, se forma en verano y se transforma en el siguiente estío. Lo que toca es disfrutar de este equipo, el que ha firmado los mejores números como local en la historia obradoirista en la ACB.