El Concello asegura que no hay «ningún uso alternativo» previsto para el edificio del hospital, ni público ni privado
05 may 2015 . Actualizado a las 09:45 h.Delegados de prevención del sindicato CIG han solicitado una evaluación de riesgos laborales en el Hospital Gil Casares, debido al «estado de deterioro que presenta», y a haberse caído el techo de la habitación 118 de la primera planta del centro, de cuidados paliativos, el pasado día 22. Allí se encontraban ingresados dos pacientes y familiares. Atribuyen a la «fortuna» que no ocurriesen daños personales.
Reprueban que el boquete abierto en el techo sigue sin reparar y existen además grietas y otras deficiencias, que evidencian que este hospital, situado cerca del Clínico «está caendo a cachos e pode ter graves consecuencias para o persoal e para os usuarios».
Este sindicato ha enviado escritos a grupos parlamentarios, al Concello y a la gerencia, para preguntar si la falta de atención a las instalaciones se debía a la previsión de dedicarlas a otros usos.
El alcalde, Agustín Hernández, les respondió que «non hai ningún proxecto nin está previsto prescindir de ningún dos servizos e unidades» y «non se concretou ningún uso alternativo deste edificio con ningunha institución pública nin privada». Además, se hacen «obras de mantemento precisas e algunhas actuacións de mellora como as levadas a cabo en Saúde Mental», agrega.