Un cambio en el PXOM libra al Banco do Pobre de las expropiaciones

x. r. santiago / la voz

SANTIAGO

No habrá ayudas extraordinarias para rehabilitar las viviendas y los vecinos deben recurrir a las ordinarias

06 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos de la urbanización San Ignacio de Loyola (conocida por el Banco do Pobre) empiezan a ver el final del túnel en el que estuvieron inmersos en la última década. El alcalde había prometido a los afectados variar urbanísticamente esa situación. Y el gobierno local ya ha decidido formalmente hacerlo, lo que supone que los afectados seguirán en San Ignacio. La regeneración del barrio pasa por la modificación puntual del Plan Xeral de Actuación Municipal (PXOM).

Y el proceso de tramitación de ese cambio va a iniciarse este mismo mes, según la previsión de los responsables locales. Esta andadura urbanística finalizará necesariamente en el próximo mandato, puesto que durará unos meses. Pero el inicio de los trabajos supone para los habitantes de la zona la verificación de que sus quebraderos de cabeza se acaban.

Unos quebraderos que comenzaron hace una década con una resolución administrativa que venía a destinar una reserva de suelo en la zona de San Ignacio de Loyola y en las viviendas existentes en el entronque de la avenida de Mestre Mateo y la travesía de San Lourenzo para alojar las instalaciones universitarias de Medicina.

Eso venía a implicar la expropiación de los terrenos necesarios, con su medio centenar de viviendas, y la hipoteca urbanística del área reservada. La modificación proyectada «va a eliminar la expropiación que pesa sobre ese ámbito», resalta Raxoi, quien agrega que supone el «cumplimiento de la promesa» que Agustín Hernández les hizo a los vecinos para «solucionar un problema heredado».

Una de las consecuencias obvias de ese cambio es la posibilidad para los residentes de proceder a la mejora de sus viviendas y de la propia urbanización, lo que precisará que las administraciones arrimen el hombro. No obstante, pone de relieve el gobierno compostelano que las ayudas a la rehabilitación no pueden enmarcarse en un área de rehabilitación integral «porque no estamos hablando de edificios de valor patrimonial, catalogados o sometidos a algún régimen de protección», por lo que los vecinos solo podrán acceder a las ayudas ordinarias que existen para la mejora de viviendas y de edificios del Plan de Vivienda.