Los técnicos están llevando a cabo entretanto trabajos preparatorios para proceder a la restauración del conjunto
25 ene 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La eliminación de las humedades es un factor esencial para proceder a la restauración del Pórtico de la Gloria, que la gente podrá volver a ver con su policromía cuando todo acabe. Pero mientras no se produzca la impermeabilización y el secado a fin de que las filtraciones no echen por tierra la operación restauradora, no podrá acometerse la última fase de los trabajos.
No obstante, en el Pórtico ya han venido trabajando los expertos y continúan haciéndolo en esta fase preparatoria. Por lo de pronto, ya saben tras las catas e investigaciones realizadas que hay restos de distintas capas de policromía ocultas en los elementos del Pórtico. La curiosidad de las personas por ver cómo va a quedar finalmente esa fisonomía polícroma, y por ver completada la restauración, tendrá que aguardar probablemente tres años, aunque, como señalan los responsables de la basílica, en este tipo de intervenciones los plazos siempre son orientativos, porque lo importante es acertar en el trabajo.
Lo que están haciendo actualmente los expertos es completar la documentación y los estudios iniciados y efectuar una serie de actuaciones esencialmente de carácter preventivo (retirada de acabados plásticos, morteros de cemento, cepillado de sales, etcétera), la monitorización de las condiciones ambientales y del secado (que tiene que hacerse con gran cuidado) y otras acciones preventivas.
Luego vendrá la acción propiamente restauradora con los tratamientos adecuados. Aquí sí que es necesario pararse un poco: al menos dos años.