Madrid toma el control del Consorcio con enfado de la Xunta

x. r. santiago / la voz

SANTIAGO

Impedirá que haya partidas finalistas como las de las obras de la Catedral

19 dic 2014 . Actualizado a las 09:03 h.

Madrid ya es dueño y señor del Consorcio de Santiago, y así lo recogen los estatutos que van a regir el organismo, cuyos directivos se reunirán el lunes. Unos estatutos que no gustan en San Caetano, que ya ha resuelto recurrir alguna de la cláusulas que consideran perjudiciales. Es un enfrentamiento que, si no se encauza, tendrá como perdedor al propio Consorcio. Los estatutos de Santiago determinan, en el artículo 1, «la adscripción del Consorcio de la ciudad de Santiago a la Administración general del Estado». Y para canalizar esa adscripción en un departamento concreto se ha decidido que sea el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.

Uno de los aspectos más destacados del nuevo texto, y que es causa de fricción de las Administraciones central y autonómica, reside en la imposibilidad de contemplar partidas finalistas. Se pueden efectuar subvenciones, pero no cantidades para un objetivo cerrado. Han de estar a disposición del Consorcio.

Es una política que ha venido practicando la Xunta, que utilizó el organismo para canalizar partidas (y así cumplir de paso con el Consorcio) hacia determinadas actuaciones. Ocurrió, por ejemplo, con la aportación de Cultura a la catedral, que hizo figurar en el Consorcio. La Xunta ha resuelto recurrir este artículo.