El empuje exterior maquilla la caída del tráfico interno, que llega al 9 % en los vuelos a Madrid

La Voz

SANTIAGO

24 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Si Lavacolla tiene su motor en el incremento de la demanda de los vuelos internacionales, el lastre está en el desplome de las líneas domésticas. Solo ese aumento de más de 50.000 pasajeros en lo que va de año respecto a todo el 2013 en las rutas exteriores puede compensar un balance muy pobre de las conexiones interiores, en las que destaca la pérdida de peso de los enlaces con Madrid. Los vuelos con Barajas han trasladado en los diez primeros meses del año a 414.512 viajeros, un 9 % menos de los 456.516 contabilizados en el mismo período del 2013. Estos datos evidencian que no es casual que Santiago perdiera hace más de un año en favor de A Coruña su liderazgo en las conexiones aéreas de Galicia con Madrid. El comportamiento de los vuelos con Barcelona no es mucho mejor, con 326.157 usuarios frente a 341.709 entre enero y octubre del 2013.