La feria equina con más arraigo de Galicia incorpora un mercado agrícola y de artesanía con ochenta puestos
11 nov 2014 . Actualizado a las 10:33 h.La carballeira de Francos, en la parroquia teense de Calo, recupera durante toda la jornada de hoy la tradición equina de la comarca al acoger la feria, que en su día fue un referente no solo en Galicia y que con el paso del tiempo ha decaído como epicentro ganadero pero sin dejar de ser la romería más importante del otoño. La carballeira de Calo permitirá el paso de vehículos hasta las nueve de esta mañana, y solamente podrán circular los camiones que transportan a los caballos para su venta o intercambio. Una vez instalados los animales, el espacio natural de Francos se cierra a cal y canto a los vehículos y se convierte en un gran pulmón tan verde como peatonal.
Como en años anteriores, los animales a la venta estarán colocados en zonas habilitadas en la carballeira, amarrados a unos postes especiales para evitar que dañen los carballos, como ocurría anteriormente.
Como complemento a las transacciones equinas están los puestos para la compra de todo cuanto se pueda necesitar para cuidar un caballo y cabalgar. Más de 80 puntos para la venta de productos de alimentación tradicional y objetos de artesanía, junto a una muestra de razas autóctonas de Galicia, servirán también como reclamo para una afluencia cuyo número estará condicionado por la meteorología.